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La falsa narrativa de la ciudad perdida

Resulta por demás insólito: la mayor parte de las encuestas le dan a Clara Brugada una ventaja de dos dígitos sobre el panista Santiago Taboada, pero el 85% de los columnistas llevan días vaticinando que la candidata del obradorismo va a perder en la CDMX.

En realidad, la ventaja de la morenista sobre el panista es suficientemente amplia. Si calculamos el promedio de 66 encuestas realizadas entre septiembre de 2023 y marzo de este año, Clara tiene una preferencia del 48%, sobre un 33% de Taboada. ¡Son 15 puntos! La ventaja es mayor cuando observamos que las encuestas hechas en vivienda –más creíbles– le dan 52% a Clara y 29% a Taboada.

La falsa narrativa de la ciudad perdida

Con esas diferencias en las encuestas, ¿cómo explicar las predicciones de la opinocracia? Una de dos: o los analistas están expresando un deseo personal o estamos ante una estrategia concertada para instalar la idea de que la ciudad está perdida.

Ciertamente la elección en la capital será más competida que a nivel nacional, pero los argumentos con los que la comentocracia busca construir la narrativa de que la exalcaldesa de Iztapalapa va a perder no tienen asidero racional.

Viri Rios –una analista sólida y que respeto, pero con la que no coincido esta vez—planteó este lunes en Milenio que "la CDMX pavimenta una victoria opositora". Aclaro de entrada: Viri es una voz independiente y no actúa por consigna, pero creo que esta vez erró.

Ríos plantea que el panismo en la CDMX es más efectivo al movilizar votantes a las urnas que Morena. Para respaldar su afirmación la analista señala que en 2021 el PRIAN logró 119 casillas "zapato", donde ganó por más del 90%.

Ríos, al parecer, olvida que en la elección de 2021 el porcentaje de votos que obtuvieron en la capital PAN, PRI y PRD juntos fue casi idéntico (45.1%) que el de la suma de sus votos por separado en 2018 (44.1%). La diferencia fundamental estuvo en que los morenistas no salieron a votar como lo hicieron en la histórica elección que llevó a AMLO al poder (escribí un texto al respecto https://shorturl.at/dryX2).

El argumento de que "el PAN moviliza mejor" en la ciudad debe ser tomado con reservas, pues no es lo mismo lograr casillas zapato en ciertas zonas de alto nivel socioeconómico, que mover el voto masivo en toda la ciudad. Por lo demás, no olvidemos que algo similar se dijo durante mucho tiempo sobre el PRI en el Estado de México, y aun así perdieron la última elección.

Más importante aún, no se puede comparar una elección intermedia, como fue la de 2021, con una elección concurrente, como la que tendremos en 2024, pues la participación en este último caso suele ser mayor. Además, el voto por presidente por lo general jala a votar por otros cargos en disputa a favor de su mismo partido.

Es cierto, entre algunos sectores medios de la capital ha crecido el descontento hacia el presidente López Obrador. Su rechazo hacia el presidente se ve y se escucha más, especialmente porque se trata de un sector muy vociferante que ha comenzado a organizarse más y mejor.

Sin embargo, la aprobación de AMLO en la Ciudad de México no presenta signos mayores de desgaste ni se ha desplomado. Si acaso presenta una caída de unos cuantos puntos.

En 2021 factores como el Covid o la caída de la Línea 12 del Metro generaban descontento entre los capitalinos, mientras que el tipo de candidatos que eligió Morena, y la falta de movilización de sus propias bases, afectaron el resultado.

Viri Ríos plantea que las encuestas tienden a subestimar las preferencias electorales de las clases medias y altas, porque estas no abren tan fácilmente la puerta a los encuestadores, e incluso afirma que las alcaldías más pobladas, como Iztapalapa y Gustavo A. Madero, tienen más probabilidad de ser encuestadas. Esto, asume ella, sesga las estimaciones a favor de Brugada. Falso.

Si las premisas de Viri fueran ciertas tendríamos que dudar de todas las encuestas. 

  Y es que su argumento implica asumir que los encuestadores son incapaces de llevar a cabo un ejercicio de muestreo probabilístico adecuado, como el que suelen hacer para asegurar la representatividad de sus ejercicios demoscópicos.

@HernanGomezB