El poder político y la familia
En el marketing político hoy se analiza con mucha seriedad la influencia de la familia y los amigos cercanos, en la reputación de gobernantes y candidatos. Ellos representan un área de alto riesgo.
Sólo por el blindaje reputacional y el afecto que rodea al presidente López Obrador, es que hasta ahora ha podido contener el huracán de la "casa gris".
Debemos entender cómo opera el mundo de hoy, —dominado por las redes sociales—, donde la transparencia es un requisito indispensable para mantener limpia la reputación.
A su vez, la cercanía con el poder o la fama despierta en el común de la gente una curiosidad morbosa, por lo cual la familia de actores políticos siempre estará bajo escrutinio público.
Las fotografías que exhibió en redes sociales la hija del líder petrolero Carlos Romero Deschamps, presumiendo sus viajes en avión privado y lujos, evidenciaron el privilegiado nivel de vida que su padre le ofrecía.
Quien exhibió la existencia de la "casita blanca" fue la misma Angélica Rivera, lo cual generó un tsunami para el presidente Peña Nieto.
En el ámbito de la vida privada es donde aparece la familia, dando indicios de acciones que lastiman la sensibilidad pública de este país resentido.
El morbo es el alimento de la curiosidad y las familias de los políticos siempre dan pie al escándalo. A partir de las redes sociales los escándalos no se encapsulan ya en el país de origen, sino que dependiendo de la importancia del personaje se pueden convertir en tendencia noticiosa global. Esto no lo ha entendido aún nuestro presidente.
López Obrador no se ha escapado a la maldición de los escándalos familiares. Aún están presentes en la memoria colectiva los videos de los dos hermanos recibiendo dinero. Sin embargo, el asunto de la "Casa Gris" podría tener graves repercusiones jurídicas en Estados Unidos, lugar donde radica José Ramón y donde su esposa se desenvuelve profesionalmente en el ámbito de los hidrocarburos. Allá los criterios morales tienen otros significados. La visión ética sí genera consecuencias. (Presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación)
Twitter: @homsricardo
