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El pasado glorioso

  • Por: FORTINO CISNEROS CALZADA
  • 16 SEPTIEMBRE 2020
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El pasado glorioso

Este día, los mexicanos celebran el Día de la Independencia, luego de la Noche del Grito, dos fiestas cívicas en las que se siente el orgullo de ser nativo de esta tierra singular donde han ocurrido hechos notables. Fue don Miguel Hidalgo y Costilla quien inició el levantamiento armado en contra del gobierno virreinal, no contra España, país invadido por las tropas napoleónicas que derrocaron a los reyes Fernando VII y Carlos III, para fundar un estado asociado de Francia bajo el imperio de José (Napoleón)I.

Para esa época, la Nueva España era una colonia de la metrópoli; pero, en nada desmerecía a la madre patria en cuanto a riqueza, pujanza y esplendor. A partir de que, en 1537, el Papa Paulo III expidió la bula Sublimis Deus, que ha sido considerado el primer documento en defensa de los derechos humanos, la situación que prevaleció luego de la Conquista entre nativos y venidos de ultramar, cambió radicalmente.

Para Helen-Rand Parish: "La bula marcó literalmente el verdadero comienzo del derecho internacional en el mundo moderno: la primera proclamación intercontinental de los derechos inherentes a todos los hombres y de la libertad de las naciones". Alejandro Rosillo, por su parte, sostiene que la importancia de la bula radica en ser el primer documento oficial que estableció la igualdad de los indios con los demás habitantes del planeta.

La parte substancial reza que: "...haciendo uso de la Autoridad apostólica, determinamos y declaramos por las presentes letras que dichos Indios, y todas las gentes que en el futuro llegasen al conocimiento de los cristianos, aunque vivan fuera de la fe cristiana, pueden usar, poseer y gozar libre y lícitamente de su libertad y del dominio de sus propiedades, que no deben ser reducidos a servidumbre y que todo lo que se hubiese hecho de otro modo es nulo y sin valor; que dichos indios y demás gentes deben ser invitados a abrazar la fe de Cristo a través de la predicación de la Palabra de Dios y con el ejemplo de una vida buena, no obstando nada en contrario. Dado en Roma en el año 1537, el cuarto día de las nonas de junio, en el tercer año de nuestro pontificado".

Por esa época, luego de la gubernatura de Hernán Cortés y de dos audiencias colegiadas para gobernar, se establece, el 17 de abril de 1535, el virreinato con don Antonio de Mendoza como primer virrey, quien, junto con fray Juan de Zumárraga, obispo (y luego arzobispo) de México propiciaron la llegada de la primera imprenta; el levantamiento de la primera ermita construida en el Tepeyac para atender el deseo de la Virgen de Guadalupe, iniciando el culto que se ha convertido en el mayor fenómeno sincrético; y el inicio de lo que sería la Real y Pontificia Universidad de México. 

Además, estas medidas permitieron tres siglos de expansión hasta abarcar los territorios de las actuales estados y países: California, Nevada, Colorado, Utah, Nuevo México, Arizona, Texas, Oregón, Washington y Florida en los Estados Unidos, así como parte del sur del actual Canadá, la totalidad de Centroamérica, las islas de Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, Trinidad y Tobago, Guadalupe, y las Filipinas, las Carolinas y las Marianas. 

Críticos de la Colonia señalan que fue una ocupación de despojo, por cuanto las labores extractivas eran la actividad económica preponderante. De México, para España, se extrajeron 56,144 toneladas de plata y 191.8 toneladas de oro (cien mil toneladas de plata y dos mil 500 toneladas de oro en todo el continente, de 1521 a 1830), lo que hizo de España la gran potencia de la época; sin embargo, es necesario tomar en cuenta que hubo una enorme expansión colonizadora que dio auge a la construcción de vivienda y de edificios públicos y confesionales. Obras portentosas, que ningún avance técnico, tecnológico o científico ha podido igualar, se erigieron en la mayor parte del territorio nacional; sólo la región norestense quedó exenta por su tardío poblamiento. Con el auge de las ciudades, vino la producción y el comercio de bienes y servicios, creándose, con el conocimiento de los españoles, la habilidad de los aborígenes, la fuerza de los negros y el ingenio de los mestizos, una cultura nueva en todos los aspecto: comida, vestido, vivienda, recreación, transporte, religión, arte y ciencias. 

Juan Ruiz de Alarcón, Carlos de Sigüenza y Góngora y Sor Juana Inés de la Cruz fueron cumbres luminosas del saber y del decir que mostraron al mundo el talento novohispano. La invención del estípite, es un aporte arquitectónico en cierto sentido contestatario. En la Nueva España, el elemento más utilizado en portadas y retablos fue el estípite, componente específico del Barroco mexicano.

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