Día del Chayotero
Como dicen en el rancho, ‘En boca cerrada no entran moscas” o lo que es lo mismo “Lengua que no tuvieras y no andarías en problemas”, adagios populares que aplican como anillo al dedo al alcalde reynosense CARLOS VICTOR “El delirante” PEÑA ORTIZ, quien como lo han de saber mis lectores, en esta semana y a raíz de las declaraciones del presidente DONALD TRUMP de enviar grupos de Seals a nuestro México lindo y querido para poner en su lugar a los malandracos, toda vez que el Gobierno federal no lo hace, le dio al jefe edilicio por declarar sobre ese tema, en donde regó todo el tepache.
El pedir que el gobierno norteamericano cumpla las promesas de Trump es hasta delictivo, porque si bien no está consumado el hecho, con sólo invocar su simpatía con esa intención ya está dando a entender de qué lado se peina.
Y es que, oiga usted, El Makito como otros reynosenses que nacieron de aquel lado del río Bravo, no sienten ningún afecto por nuestra madreada y peligrosa Reynosa, les resulta indiferente lo que por aquí pase, y si bien que los equipos Tierra, Mar y Aire de la Armada de los Estados Unidos (Seals) se internen en territorio mexicano recibirá aplausos de no pocos y no por traidores a la patria, sino porque los encargados de combatir el delito no lo hacen y, en todo caso, ellos sí son traidores a la patria.
Pero una cosa es que un ciudadano abra su ronco pecho para soltar su simpatía con las intenciones del presidente Trump, y otra que lo hagan funcionarios públicos que, aunque en el fondo deseen esa medida, no pueden ni en broma pedir semejante cosa.
Makito la regó y consiguieron que lo entrevistara AZUCENA URESTI, de Milenio, para desmentir lo que un día antes había manifestado. Por ello el refrán, “En boca cerrada no entran moscas” y al Makito, sus asesores van a tener que decirle en qué temas sí puede opinar y en cuáles permanecer callado.
Debió ver lo que declaró el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA cuando le preguntaron sobre este asunto, limitándose a responder que el gobierno de Tamaulipas se estaba preparando para recibir a los deportados.
Hoy, Carlos Víctor El Delirante está embroncado y nada menos que con la Presidenta CLAUDIA SHEINBAUM, una bronca que no le va a costar la chamba porque, finalmente, no tiene peso político como para animar a otros a que hagan lo mismo que él, y ahí queda cerrado ese capítulo y aquí se está en espera de deportados, que como lo comenté en columna anterior, ojalá y el ayuntamiento no permita que la plaza de la República la conviertan en un campo de refugiados.
Tampoco deben instalar ese centro en el Parque Cultural que de por sí ya está bien madreado por las prestadas para que en sus terrenos se lleve a cabo la feria de Reynosa, que eso de Reynosa es un decir, nadie sabe quién la organiza y ni mucho menos para qué causa se destinan las utilidades.
Pero si en un momento dado el Gobierno federal ya decidió que el Parque Cultural sea el albergue de refugiados, los organizadores de la feria ya tendrán que ir buscando otro lugar, pues la misma está proyectada para marzo.
Y a propósito de bochinches, el día de hoy se llevará a cabo un festejo por el Día del Periodista y lo organiza el ayuntamiento de Reynosa.
Será un convivio en el que solamente invitaron a los mariachis de KARLA LUNA, que todavía falta acudan, pues les siguen debiendo el pago de los convenios de los meses de octubre, noviembre y diciembre, y no hay trazas, según me contaron, de que se vayan a poner a mano ni en febrero, y si bien les va un abono por marzo, un incumplimiento que lógicamente trae enfurruñados a quienes tocan fanfarrias con la letra de los boletines que les envía Comunicación Social con la advertencia de que, si no los difunden, se acabó el trato.
Pero independientemente de esos incumplimientos, me parece inapropiado que el ayuntamiento organice un mitote por el Día del Periodista, que fue el pasado 6 de enero, y no por la extemporaneidad de la fecha, sino porque lo que menos ha mostrado El Makito es ser respetuoso de la libertad de expresión, llamando chayoteros a todos aquellos periodistas que ejercen crítica, sin que hasta la fecha hayan demostrado estar mintiendo.
Nomás que como si fuera payaso carpero, revira que son chayoteros, lo que produce la risotada entre el respetable público, que vienen siendo los periodistas de a de veras.
A Carlos Víctor El Delirante se le olvida o ignora que se le llama chayotero a todo aquel periodista o remedo de esta actividad que está a cuota con el municipio, el Estado o la federación. Y digo que a cuota porque, una cosa es vender publicidad y otra muy diferente que a cambio de que controles ese servicio se ven obligados a permanecer mudos ante todas las irregularidades que diariamente da motivo, ya bien El Makito o sus colaboradores, lo mismo del palacio municipal que de la Comapa
Eso es ser chayotero, y son aquellos que cobran en el ayuntamiento para permanecer silenciosos, porque si no, pues no hay convenio, así que con su pan se lo comen el día de hoy en este festejo.
Por otro lado, los diputados de Movimiento Ciudadano en el Congreso del Estado, JUAN CARLOS ZERTUCHE ROMERO y MAYRA BENAVIDES hicieron una propuesta en el sentido de que mediante decreto se les den facultades a los municipios para adecuar normas y proponer soluciones que respeten los derechos humanos de los migrantes que lleguen a los municipios fronterizos.
Esta iniciativa tiene la finalidad se coadyuvar con los ayuntamientos ante la situación que se vivirá por el tema de las deportaciones masivas.
Siguiendo con cuestiones positivas, MARCELO OLÁN MENDOZA, el jefe de la Oficina Fiscal del Estado, fiel a su costumbre de desarrollar actividades sociales, durante la pasada helada vaya que sí caló hasta los huesos, y así anduvo repartiendo cobertores y alimentos para quienes se las ven negras en este tipo de temporada invernal.
Y es que, oiga usted, en esta región no se acostumbra a comprar ropa de invierno, porque el clima prevaleciente, el 90 por ciento del año es cálido, y cuando nos cae una helada, la sufrimos. El columnista fue uno de ellos, se congeló el agua que estaba almacenada en el Rotoplas de mi casa.
Y los reynosenses estuvimos cruzando los dedos porque las bajas temperaturas no provocaran apagones como se registraron en algunas partes del valle del Rio Grande, y ahí sí que nos las hubiéramos visto muy duras. Gracias a Dios, las redes de electricidad y transformadores aguantaron las naturales sobrecargas por el consumo de energía eléctrica.
Y por hoy, BASTA.
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