Amenazan a Sinaloa lluvias e inundaciones
Las ráfagas siguieron causando daños a medida que la tormenta se desplazaba hacia el noreste
- Cabo San Lucas, BC
Norma, que tocó tierra el sábado en el extremo sur de la península de Baja California Sur como huracán categoría 1, avanzaba el domingo hacia el México continental, hacia el estado de Sinaloa, donde se esperaban fuertes lluvias e inundaciones.
Las ráfagas de Norma siguieron causando daños, a medida que la tormenta se desplazaba hacia el noreste, cruzando el Golfo de California en dirección al México continental, donde se ordenó el cierre de las escuelas para el lunes.
En Sinaloa y en el vecino estado de Sonora se instalaron refugios con capacidad para casi 13.000 personas y más de 5.000 marinos se habían desplegado en los estados afectados con ayuda de primera necesidad.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), Norma, que llegó a ser un huracán categoría 4, el domingo al caer la noche tenía vientos de 100 km/h (65mph) y se localizaba a 170 kilómetros (105 millas) al oeste de Culiacán y a unos 100 kilómetros (65 millas) al sur-suroeste de Los Mochis, las dos principales ciudades de Sinaloa.
La tormenta se movía lentamente hacia el noreste a través del Golfo de California a 6km/h (3mph).
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Hasta 45 centímetros (18 pulgadas) de lluvia podrían caer en algunas zonas el lunes, advirtieron los meteorólogos. "Estas lluvias producirán inundaciones repentinas y urbanas, junto con deslizamientos de tierra en zonas de terreno más elevado", dijo el NHC.
EVALÚAN AFECTACIONES
Las autoridades mexicanas no informaron de víctimas mortales en el estado de Baja California Sur, donde había zonas que seguían sin electricidad mientras los bomberos retiraban árboles y ramas caídas.
Las autoridades locales sólo informaron de un turista argentino herido. Mientras tanto, los extranjeros volvían a las calles de Los Cabos, unos lamentando que muchos negocios siguieran cerrados, otros pensando en marcharse.
"Nos dijeron que ya está abierta la terminal aérea y queremos regresar a San Diego, ya que pasó el peligro del huracán", dijo el estadounidense Henry Brown mientras esperaba un taxi que le llevara a él y su esposa al aeropuerto de San José del Cabo, que reinició actividades por la mañana.
La situación estaba un poco más complicada en La Paz, capital de Baja California Sur, donde habían caído lluvias torrenciales durante el sábado y el aeropuerto se mantenía cerrado el domingo por la noche. Lo mismo ocurría con el sinaloense de Los Mochis.
En La Paz, caudales de agua con troncos, tierra y basura cruzaban muchas de las carreteras, con lo que varios accesos a la ciudad estaban bloqueados. Elementos de las fuerzas de seguridad hacían rondines en busca de personas que necesitaran ayuda. En la bahía de la ciudad quedaron varados varios barcos, entre ellos, uno con unos 400 pasajeros procedente de Sinaloa al que la tormenta agarró navegando. Se alistaban a desembarcar al caer la noche, indicó el gobernador Víctor Castro en sus redes sociales.