Viven calvario familias de pescadores y marinos en Acapulco

ACAPULCO, Guerrero .-Casi a las 12 de la noche del 25 de octubre cuando el huracán "Otis" con sus vientos y lluvia alzaban las olas a grandes alturas, el pescador Ulises Castillo Hernández no midió las consecuencias y se tiró al mar para amarrar de los cabos su embarcación que estaba lejos del muelle del Paseo del Pescador.

 Ulises, o "El ceviche", como le dicen sus amigos, no quería que a su cayuco, al que nombró "Valeria Abigail", se lo tragara el mar, pues representaba su patrimonio y el sustento económico para mantener a su familia.

 "El Jerry", un amigo de Ulises que lo apoyó tirándole las luces desde su camioneta cuando se tiró al mar, pudo ver como éste se perdió entre las olas del mar y es la fecha en que no aparece.

 Familiares de tripulantes de embarcaciones que están desaparecidos cuentan que el amigo de Ulises Castillo le dio mucho miedo y se alejó del lugar y dejó abandonada su camioneta para ponerse a salvo de los vientos y el agua que ya inundaba la avenida Miguel Alemán, cerca de la playa Tlacopanocha.

 Desde el 25 de octubre, la señora Yazmín Hurtado Alarcón y Valeria Castillo Hurtado, esposa e hija de Ulises Castillo, se plantan al pie de un árbol que está en la rotando de Los Hombres Ilustres, cerca del muelle del Paseo del Pescador en espera que las autoridades les den noticias de que ya hallaron al pescador.

 Madre e hija llegan desde las 8:00 horas a este lugar, al igual que familiares de otros tripulantes de yates y lanchas que llevan 21 días desaparecidos.

 Doña Yazmín de vez en cuando camina hacia el muelle y fija su mirada en algún punto del mar donde ella supone que su esposo y la embarcación se perdieron entre las olas.

 Sobre los troncos de los pocos árboles que quedaron en pie cerca del muelle del Paseo del Pescador, están pegadas carteles con las fotografías y los nombres de algunos de los tripulantes de embarcaciones que siguen desaparecidos.

 "Todavía no aparece y estamos a la espera de que nos den información", dice Yazmín.

 Valeria Castillo, hija de "El Ceviche", acusa al Gobierno de no informar la verdad de la tragedia que ocurrió durante la entrada de "Otis" en Acapulco.

 "Si el Gobierno está diciendo que hay más de 600 embarcaciones y que la mayoría fueron destruidas y entonces dónde están los tripulantes?", preguntó Valeria.

 De acuerdo con el compromiso que suscriben los tripulantes con el dueño de las embarcaciones, los primeros deben de cuidarlas en todo momento, aún cuando se registren tormentas o huracanes, en caso de que no lo hagan es motivo para una demanda judicial en su contra.

 Eso lo establece un documento que, según los familiares de las víctimas, firman con los empresarios.

 Los familiares de capitanes y marineros realizaron una nueva protesta el pasado domingo afuera de las instalaciones de la Zona Naval para exigir a las autoridades que busquen a sus familiares desaparecidos.

 "Aquí en esta zona murieron muchos tripulantes, solo hay que ver como quedaron destrozadas las embarcaciones que resultaron destrozadas y encalladas en varios lugares como en el Club de Yates o en La Marina", dijo Valeria Castillo.

 Por su parte, Alfonso Arguello Benítez, quien tiene a tres familiares desaparecidos, pues estaban a bordo del yate Rose Mary, contó que hay testigos que aseguran que el miércoles 26 de octubre al menos diez cadáveres salieron a flote en el mar cerca del muelle del Paseo del Pescador.

 "Obvio que en estos momentos ya no van a aparecer los cuerpos flotando porque ya reventaron y se encuentran en el fondo del mar, pero la Marina no los busca", dice Alfonso Arguello.

 Los familiares desaparecidos que tiene Alfonso Arguello es su suegra, María Delgado Valdovinos, así como el hijo y nieto de ella, Luis Sebastian Herrera Delgado, de nueve años y Luis Alberto López Sarabia, de dos años de edad.

 La señora, su hijo y nieto acompañaron ese día a su esposo, el capitán del yate Rose Mary, Inocente Herrera, quien fue el único que logró sobrevivir esa noche del 25 de octubre.

 "Mi suegra acompañaba a su esposo en el yate porque le ayudaba y pues la verdad creo que no se esperaba fuera así de fuerte el huracán", menciona Alfonso Arguello.

 Alfonso Arguello criticó a las autoridades de los gobiernos federal y estatal el no haber obligado a los dueños de las más de 600 yates y lanchas a que sus trabajadores no acudieran a al mar para cuidarlas.

"El Gobierno ya sabía como venía de fuerte el huracán 'Otis' y no tomó medidas preventivas para evitar muchas muertes en el mar y en tierra de aquí en Acapulco", criticó Alfonso Arguello.

 Desde el paso del "Otis", los dueños de los yates y lanchas no se han acercado con los familiares de sus trabajadores que no aparecen.

 "En el caso del dueño del yate Rose Mary ni nos está apoyando en nada y la búsqueda la están haciendo buzos privados a quienes se les está pagando", dijo Alfonso Arguello.

 Mencionó además que un familiar que trabajaba en el yate "Orca" que también estaba desaparecido, ya fue hallado muerto.

 En el tronco de otra palmera de la Rotonda de los Hombres Ilustres está pegado una cartulina con la fotografía de Gustavo Hurtado Carranza, de 39 años de edad, quien estaba en una embarcación llamada "Bacchus" y la última vez que se le vio fue en la playa Icacos.

 Otro grupo de familiares de tripulantes de embarcaciones desaparecidos se instala frente a la playa Tlacopanocha.

 En la página de Facebook del "Club de Yates" se pide la colaboración de las autoridades y la ciudadanía de la localización de 13 tripulantes de embarcaciones desaparecidos durante el huracán "Otis".

•  Desde el 26 de octubre, familiares que trabajan en yates y lanchas llegan en el muelle del Club de Yates para esperar informes de sus desaparecidos.