Fijan meta de vender mil 800 roscas de reyes

En Reynosa, Miguel Alemán, Río Bravo y Matamoros, el grupo Despertar de Drogadictos Anónimos ha comenzado su tradicional venta de mil 800 roscas de reyes con el propósito de recaudar fondos destinados al mantenimiento y necesidades de los jóvenes en rehabilitación. 

José Alberto Saucedo, secretario del grupo, comentó que es una rosca tradicional con su característico sabor a naranja, ate, higo, pasta y está hecha de manera artesanal, preservando el sabor que los identifica.

Explicó que el grupo Despertar, que lleva 31 años realizando esta actividad, destina los fondos recaudados al mantenimiento del centro, alimentación y atención de los jóvenes en rehabilitación. 

Además de la rehabilitación, el grupo ofrece talleres como el de panadería, donde los jóvenes aprenden un oficio que les permite contar con herramientas para su reinserción social. 

"Nosotros invitamos siempre a la comunidad a que puedan venir tanto sus familiares, personas que necesiten ayuda para que bueno, como es un trato totalmente digno, el proceso de rehabilitación es totalmente gratuito, por lo regular buscamos el bienestar de cada uno de los compañeros que van llegando, siempre invitamos a las familias que puedan conocer un poquito más de Drogadictos Anónimos del grupo Despertar", dijo.

Actualmente cuentan con 30 personas en proceso de rehabilitación dura alrededor de tres meses, aunque hay quienes deciden quedarse más tiempo para continuar su formación, algunos incluso optan por convertirse en servidores del grupo y apoyan a nuevos integrantes, promoviendo una cadena de ayuda y solidaridad.

José Alberto Saucedo extendió una invitación a las familias de la región para conocer más sobre el grupo Despertar y su labor en la rehabilitación de jóvenes con problemas de adicción. 

También animó a la ciudadanía a adquirir una rosca, no solo para disfrutar, sino para contribuir a una causa.

"Muchos compañeros que llegan en situación de calle, que llegan sin un oficio, sin herramientas, cuando los compañeros llegan primero viven su proceso de rehabilitación, que eso es lo importante, posteriormente si se le invita a tomar está decisión, de que si quiere aprender, le enseñamos sin problema el taller de panadería y el día de mañana cuando tenga una reinserción social le pueda servir y le pueda funcionar", recalcó.