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Arriesgan el físico

Agujeros en el piso ya se observan, resultado de la falta de mantenimiento de parte de las autoridades a las que corresponde mantener en buen estado ese tipo de instalaciones

Grave peligro es el desvencijado puente peatonal.Arriesgan el físico

El Mañana / Staff

Grave peligro representa para quienes utilizan diariamente el puente peatonal ubicado por la carretera Reynosa a Río Bravo a la altura de la calle Dos de Febrero de la colonia La Presa, por el deprimente estado en que se encuentra la estructura metálica.

Agujeros en el piso ya se observan, resultado de la falta de mantenimiento de parte de las autoridades a las que corresponde mantener en buen estado ese tipo de instalaciones.

El desgaste natural que al paso de los años cobra factura a todo tipo de construcciones, ya se está reflejando en el referido cruce sin que alguna autoridad se haya percatado de las desastrosas condiciones en que se encuentra.

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  • Severamente deteriorada están también varios tramos de la malla ciclónica. 

El peligro es mayor cuando van caminando por el puente varias personas al grado de que sienten que vibra, por lo que algunas personas piden que sea sometido a una profunda labor de reconstrucción antes de que suceda algún accidente que pudiera ser de consecuencias funestas.

Una señora de nombre Josefina Centeno, hizo ver la urgente necesidad de que las autoridades competentes que pudieran ser las de Servicios Públicos Primarios u Obras Públicas, se aboquen a buscarle solución al problema, aprovechando que el grueso de las personas que lo utilizan y que son estudiantes de escuelas como la Secundaria Técnica No. 44, ya se encuentran de vacaciones.

Sin embargo, también es mucha la gente trabajadora que lo usa para cruzar la carretera y tomar el transporte público que lo lleve a su fuente de empleo.

Otro de los problemas que enfrenta el cruce peatonal es la necesidad apremiante de reponer la malla ciclónica que se encuentra muy averiada y por la que podría llegar a caer a la transitada arteria, un niño de los muchos que también suben acompañados de sus papás para cruzar de un lado a otro.



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