Jean Louis Marie Berlandier, 1803-1851

Simplemente era conocido como Luis Berlandier en las comunidades del río Bravo, después que estableciera su hogar o recinto base en Matamoros, a partir de 1829 ; fue uno de los primeros hombres de ciencia en explorar y estudiar el noreste de México y Texas. Este botánico francés fue miembro de la Comisión de Limites, la cual estuvo a cargo del General José Manuel Rafael Simeón de Mier y Terán, reconocido personaje Insurgente e ingeniero ilustrado graduado del Colegio de Minería de México.  

En época de Presidente Guadalupe Victoria, esta expedición científica de límites fue integrada con el fin de recabar información sobre los recursos naturales, la población indígena y descubrir la actitud y el número de americanos que habían ocupado la frontera entre Texas y la Luisiana. Esta fue la primera comisión por parte de México que exploró la frontera con el país vecino; el carácter de ésta misión fue unilateral y no internacional. El Gobierno de México deseaba arreglar los limites convenidos en el tratado Onís-Adams, celebrado en 1819, derivados desde la compra de la Luisiana a Napoleón por parte de Estados Unidos.

Lucas Alamán, el ministro de Relaciones Exteriores e Interiores de México, fue el principal promotor de esta empresa, la cual se organizó a lo largo de dos años. Don Manuel Mier y Terán recolectó todo tipo de literatura necesaria e instrumentos de medición para este tipo de expedición.   Algunos de los instrumentos fueron comprados y otros se pidieron prestados dentro de la comunidad científica de la época.  

Los organizadores buscaron un médico-botánico, que sirviera como recolector de plantas y atendiera la salud de los expedicionarios. El recomendado fue el francés Jean Louis Berlandier, un distinguido discípulo del prestigiado botánico suizo A.P. Candolle, quien había sido también maestro del Ministro Lucas Alamán en Europa. 

Dentro del grupo los acompañaba en esta comisión estaban el Teniente Coronel José Batres y Constantino Tarnava, quienes eran los encargados de hacer las observaciones militares y geográficas. Como mineralogista se asignó a Rafael Chovell (Chowell), quien había estudiado también en el Colegio de Minería; como cartógrafo y artista al Teniente en Artillería, José María Sánchez y Tapia, quien fallecería en Matamoros durante la epidemia de cólera de 1833. 

Al final de la expedición este último sería substituido como artista por Lino Sánchez y Tapia, quien pintaría las acuarelas en Matamoros sobre los bocetos de su pariente. La obra de este pintor del estilo Costumbrista se encuentra en el Museo Gilcrease, en la biblioteca del Congreso, y en el deposito conocido como “Western American Collection” en la Universidad de Yale.

 Acuarela de la fauna registrada por Berlandier.

Iglesia de Mayrin , Suiza, donde fue bautizado Jean Louis Marie Berlandier en 1803.

La colección

Al término de las investigaciones de la Comisión de Limites, una cumulo de datos recabados durante y posterior de la exploración acabarían concentrados en la ciudad de Matamoros, bajo la custodia de Jean Louis Berlandier. La monumental colección incluía material de plantas y animales preparados para su estudio, incluyendo sus notas científicas, escritos sobre minerales, observaciones meteorológicas y astronómicas. Berlandier recolectó varios vocabularios de las lenguas indígenas a lo largo del río Bravo, así como datos etnográficos y objetos materiales de las culturas nativas de Texas y el noreste de México. 

La colección incluía los diarios de los expedicionarios, algunas publicaciones que se lograron imprimir en ese entonces, así como cartografía, dibujos, pinturas que permanecieron custodiados por Berlandier en Matamoros hasta su muerte en 1851. Por casi 25 años, este personaje vivió en México especialmente en la parte baja del río Bravo.

Su trabajo científico y el de sus compañeros expedicionarios seria comprado por el oficial del Ejército Americano, Darius Nash Couch, quién había servido bajo el mando del General Zacarías Taylor durante la Intervención Norteamericana en México (1846-1848).  En 1853, este oficial regreso en una nueva comisión científica del Instituto Smithsoniano para reconocer la flora y fauna del noreste mexicano. A través de uno de los ayudantes del boticario Berlandier, el americano logro encontrar el museo y contactar a doña Beatriz María Concepción Villaseñor, la viuda de Berlandier en Matamoros. 

Aunque existió una petición de $ 1500, Darius Couch obtendría la colección por $500 dólares para el Smithsoniano en Washington.  La colección contenía 2000 cajas (más de 2m3) con especímenes de flora y 150 botellas de cristal con animales preservados en alcohol. Desafortunadamente, el Instituto Smithsoniano pasaba por una crisis financiera, por lo que el oficial Couch, después de entregarles una parte de la colección, procedió a vender el resto a particulares, procurando recuperar su inversión. Es por esta razón que la información se encuentra diseminada en importantes instituciones de los Estados Unidos e Inglaterra.

Berlandier

A pesar de la extensa información escrita en francés como en español en la colección, se conocía muy poco de la vida personal del francés Jean Luis Berlandier. Recientemente se dio a conocer algo sobre sus orígenes en Francia, aclarando muchas de las confusiones creadas en un sinnúmero de publicaciones relacionados con este personaje.

Poco se conocía de él, antes de que partiera del Puerto Le Havre en Francia hacia el Pánuco en México. Ahora se sabe que partió un 14 de octubre de Francia teniendo 22 años de edad y que provenía de Ginebra donde había nacido. Gran confusión existía sobre el lugar de su origen, debido a que su maestro Candolle había declarado en uno de sus escritos que provenía cerca de Fort de l´Écluse (Fuerte de la Esclusa) en Francia. 

En realidad, Berlandier había nacido el 1º de agosto de 1803 en Ginebra, en el distrito de la Magdelaine donde se encontraba un pasadizo o callejón que lleva el nombre de “Le fort de l´Écluse”. Hay que entender que Ginebra había sido incorporado a Francia durante los años de 1798 y 1815, antes que la perdiera Napoleón y se independizara Suiza.  

Según el investigador Roger Bour, Berlandier fue bautizado 11 de septiembre de 1803 en la iglesia de Meyrin, localizada actualmente entre la Ciudad de Ginebra y la frontera con Francia; sus padres eran franceses:  Jean Berlandier, un comerciante de abarrotes y Marie Anne Guiardel. Algunos datos en los archivos históricos de Ginebra Suiza muestran que sus estudios fueron en la Academia de Ginebra a partir del año 1824 y que en Marsella estuvo en 1826 como estudiante de Historia Natural y trabajando en el Museo de esa ciudad. 

Según los generales presentados en el pasaporte utilizado para viajar a la República Mexicana, era un hombre de baja estatura de no más de 162 cm, de ojos, cejas y pelo color negro, con una nariz regular, boca y frente promedio, barbilla redonda, cara ovalad y su complexión era de color.

En Matamoros, Berlandier estuvo casado con Beatriz María Concepción Villaseñor con quien procreó varios hijos. En la siguiente nota contaremos sobre su presencia en las comunidades del río Bravo y su fallecimiento en el río San Fernando.