La obra 'Mariana viene cada mañana' y la depresión postparto
Reflejo de la maternidad y la salud mental
La depresión postparto, una condición que muchas mujeres suelen callar, al igual que sus familiares o personas cercanas, es el tema de Mariana viene cada mañana, obra con la que Daniel Gutiérrez Salinas obtuvo el Premio Bellas Artes Baja California de Dramaturgia Luisa Josefina Hernández.
"Por medio de este texto me gustaría poder visibilizar una situación que pasan muchas mujeres y que en la mayoría de los casos no se atiende, llegando a desembocar en resultados trágicos", comentó Gutiérrez Salinas (Monterrey, 1987).
El jurado del premio convocado por el INBAL y la Secretaría de Cultura del Gobierno de Baja California destacó el lenguaje poético de la obra, lo que favorece el ritmo de la trama, además de una estructura y secuencia sólidas.
También resaltó, de acuerdo con un comunicado, que el personaje principal es manejado con cuidado y profundidad por el dramaturgo, lo que permite la aparición de reflexiones críticas alrededor de las acciones que lleva a cabo.
- En Mariana viene cada mañana, explicó el también director de escena y actor galardonado, todo sucede en la mente del personaje.
"Ése fue mi enfoque, por lo tanto, ritmo, lenguaje y visión del personaje van unidos, por ello fue también un reto explorar sensaciones que primero me atravesaran como persona y de esa manera plasmarlo en el texto por medio del personaje", señaló.
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Gutiérrez Salinas es docente en la Facultad de Artes Escénicas de la UANL, de donde egresó como licenciado en arte teatral. Es maestro en artes escénicas por la Universidad Veracruzana y director-fundador del grupo Teatro Epifanía y de la iniciativa cultural La Esfera Dorada.
Ha publicado Crónica de una repetición cotidiana, Venus de mar y La historia del chico que quiso volar con alas de insecto, obra con la que en el 2022 fue beneficiario del Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico de Nuevo León en el área teatral como director con trayectoria.
El premio, dijo, representa para él un salto en su carrera como dramaturgo, aunque confesó que en pocas ocasiones envía sus creaciones a concurso.
Por ahora, Gutiérrez Salinas no planea dirigir su obra, prefiere que alguien más la lleve al escenario para que otra mirada explore y enriquezca la historia.
Tras más de cuatro décadas de existencia, el premio ha distinguido la obra de una larga lista de dramaturgos, entre ellos, Sabina Berman, Hernán Galindo, Estela Leñero y Javier Malpica.
El reconocimiento consta de un diploma y 150 mil pesos. El jurado estuvo integrado por la directora de teatro Jimena Eme Vázquez; el dramaturgo y actor Mario Cantú Toscano, y el dramaturgo Ángel Hernández.