×
buscar noticiasbuscar noticias

Como si fuera la primera vez

Apela mexicano a su preparación y a su mentalidad para obtener una medalla en los Juegos Paralímpicos París 2024

Como si fuera la primera vez

Guadalajara, Jalico

Con su nombre ya escrito en la historia del parapowerlifting mexicano, José de Jesús Castillo afronta sus quintos Juegos Paralímpicos en París 2024, como si fuera su primera vez en la justa veraniega.

El atleta jalisciense figura en el Top 3 en el ranking mundial en la Categoría de -107 kilos, con un levantamiento de 235 kilogramos.

Chuy Castillo tiene 23 años de trayectoria deportiva, siendo la constancia y dedicación sus principales aliados para ser medallista de bronce en Río 2016; tetracampeón panamericano en Río 2007, Guadalajara 2011, Toronto 2015 y Lima 2019, además de otros títulos mundiales. Los Juegos Paralímpicos se llevarán a cabo del miércoles 28 de agosto al domingo 8 de septiembre.

— ¿Cuál es esa sensación de asistir a otros Paralímpicos? 

Es la misma emoción de siempre, la emoción desde la primera vez que me dijeron que clasifiqué en 2008 a Beijing; es la misma sensación porque estás luchando 4 años peleando eliminatoria, competencia tras competencia, y al final de cuentas estás buscando colocarte entre los 8 mejores del mundo, que son los que clasifican y afortunadamente nos clasificamos ahora en esta ocasión en tercero del mundo. 

— ¿Cómo es Chuy Castillo como persona y como atleta?

Chuy Castillo como persona, a veces muy alegre, muy dicharachero, me gusta mucho convivir, soy, de cierta forma, amoroso, sentimental con mi familia, pero pues sí me transformo al momento de estar en la barra. En la barra sí me convierto en otra persona, soy muy aguerrido, muy agresivo en ese sentido y prácticamente es un Chuy Castillo muy diferente a como es en entrenamiento, a como es en su vida personal. 

— Ese ha sido tu sello: ser muy aguerrido y competitivo

Sí, el alto rendimiento requiere de mucho enfoque, de mucha atención en ese sentido: tenemos que aplicarnos, éste es un deporte en donde peleas con la barra todos los días, y esa pelea, esa situación, te lleva a que la barra y sus kilos es tu amigo y tu enemigo a la vez, pero tu amigo porque, al estar en contacto con ella, te va a llevar a cumplir tu objetivo; pero tu enemigo, al final de cuentas en tu competencia, porque cualquier falla te puede ir mal en competencia; entonces, tiene esas disyuntivas ahí la vida del parapowerlifting. 

— ¿Qué es para ti el para powerlifting? 

Todo, todo. La verdad es que ha sido parte de mi vida desde que comencé; comes, desayunas, cenas y hasta sueñas con powerlifting y eso se convierte, prácticamente, en una forma de vida para ti. Hay que emplearle mucho tiempo, hay que ponerle mucha dedicación, mucho esfuerzo y es una forma de vida para mí. 

— ¿Con qué aspiraciones irás a París?

Siempre vamos con la expectativa alta, con la misma intención, con la misma ilusión de colocarnos lo más alto que pueda, siempre pensando en lo dorado; si no se puede, pues está lo plateado y, si no se puede, pues está el bronce, pero siempre pelear, siempre la mira puesta en lo más alto y es por lo que vamos a pelear.

— ¿Con qué armas llegas a estos Juegos Olímpicos? 

Con mucha más experiencia. Sabemos manejar ya mejor las situaciones, competencia es competencia, siempre va a haber nervio, pero no es lo mismo el nervio de un novato al de un experimentado; entonces, en esta situación, creo que sabemos manejar mejor las situaciones. Ya tenemos muchas competencias en la espalda y esto, pues, creo que nos beneficia más de lo que nos puede perjudicar.

El trabajo que venimos realizando ha sido bueno; desde iniciando el año nos lo propusimos mi equipo: Mayra Pérez, que es la entrenadora; Giovanni, auxiliar y mi fisio, Richard Loera, trabajar para que las cosas se nos lleguen a dar en París.

— ¿Qué significa para ti que tu hijo te vea competir?

Es mi motivación, mi motor al verlo. Ya está más grande, ya dimensiona, ya me presiona, él ya espera medalla; él dice que tengo que venir con medalla, entonces, eso ya es presión, pero a la vez es más motivación que presión. Esa parte me motiva desde que nació mi bebé y siempre va dedicado a él. 

— ¿Qué te haría regresar satisfecho de París 2024? 

El objetivo es la medalla, pero de alguna forma también nos quedaremos, si no se llega a dar, satisfechos porque nosotros hicimos todo lo posible para estar ahí, para pelear, hicimos el mejor trabajo. Ésta ha sido la etapa en la que mejor preparación hemos tenido, y por ello vamos confiados en que podemos dar un resultado bueno.