“¡No lo volvería a hacer!”
Marzo 19, 2023 -
La clavadista Irma Lozano Gallo, ahora de 90 años, hizo historia como la primera regia en participar en unas olimpiadas internacionales
MONTERREY, NL.- Cuando recuerda el día en que se lanzó del trampolín de 10 metros hacia la alberca olímpica, haciendo historia como la primera regia en ir a unas Olimpiadas, la clavadista Irma Lozano Gallo sólo exclama una frase:
RECUERDA
A sus 90 años, cumplidos el pasado 9 de marzo, Irma se acuerda muy bien cuando representó a México en los Juegos Olímpicos de Helsinki de 1952, cuatro años después de que las mujeres compitieron por vez primera en esta justa deportiva.
En la delegación mexicana, cuenta, iban más de 70 hombres y sólo tres mujeres.
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“No saqué ningún premio, pero fui la más fotografiada”, apunta con una sonrisa.
Hija de Francesca Gallo y Óscar Lozano Rocha, Irma es madre de cuatro hijos, tiene 10 nietos y 7 bisnietos.
- También es una de las pioneras en abrir una escuela de natación en la ciudad, uno de sus logros que más la satisfacen. Fue profesora de generaciones de niños, niñas y mujeres.
“Soy muy disciplinada. Cuando hago algo, lo hago”, expresa Irma.
“Fui la primera en dar clases así (con su alberca)”.
Algo que le enseñó la natación, señala, es la constancia: se levanta temprano, hace ejercicio, prepara el desayuno y después se acuesta a descansar.
Sus hermanos, hijos y nietos atesoran infinidad de anécdotas que reflejan el ánimo, la perseverancia y la calidez que la caracterizan.
“Tiene mucha determinación”, dice Diana, su hermana menor.
“Siempre, lo que se propone, lo realiza”, comparte su hijo Arnoldo.
La familia destaca que, así como Irma, su abuela paterna también fue un gran modelo a seguir: Orelia Rocha Barocio, a quien recuerdan con gran cariño y admiración, fundó en 1922 el Club Femenino de Monterrey, el primer grupo de servicio formado por mujeres en la Ciudad.
La clavadista olímpica dice que no quisiera vivir tanto tiempo como su madre, quien murió a los 105 años. Sólo pide gozar de buena salud, como lo hace hasta hoy.
Tanto ella como su madre, quien llegó a ser la mujer más longeva de la comunidad italiana en Monterrey, aparecieron en la página Perfiles e Historias: Irma, el 17 de junio del 2012 y, su madre, la Nonna Francesca, el 6 de noviembre del 2011.
La ex competidora olímpica menciona que aún hay algo que quiere lograr en su vida y, con esa perseverancia que la define, seguro luchará para alcanzarlo.
“Me falta algo”, dice y sonríe, sin revelar su secreto. “Pero lo traigo en mente”.
La clavadista olímpica Irma Lozano Gallo (izq.) dice que no quisiera vivir tanto tiempo como su madre, quien murió a los 105 años.