Decepcionan Los Felinos
Gignac habilitó a Dueñas, quien tiró por un lado, y al 90’ Gignac reventó el travesaño de Talavera, en lo que pudo ser el gol de la diferencia
LOS GARZA, NL
Ante la escasez de goles y triunfos, el Estadio Universitario abucheó a unos Tigres que terminaron desesperados con reclamos al árbitro.
Los felinos decepcionaron a su afición por el cuarto empate en cinco duelos en casa, el cuarto partido sin ganar y segundo sin meter gol. Si antes sólo le pudieron ganar de local al Querétaro, ahora no pasaron de un 0-0 con Pumas.
Y anoche hasta pudieron perder, de no ser por las atajadas Nahuel Guzmán y el mal tino de los de la UNAM, que se plantaron con peligro 10 veces en el área local.
El equipo del “Piojo” se quedó sin poder desde antes de comenzar al juego, cuando Nicolás López fue baja para ser operado de apendicitis y Florian Thauvin salió de cambio al minuto 15 por una lesión en la parte posterior del muslo derecho.
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El francés se lesionó de la nada, al ir a buscar un pelotazo de Carlos Salcedo, quien ya se encontraba amonestado por una falta en la mitad el campo, en el reflejo del desorden defensivo de los Tigres.
Mientras los de casa habían inquietado por un cabezazo de André-pierre Gignac al poste, los visitantes se plantaban con facilidad frente a Nahuel.
Después, Gignac tuvo un centro de Raymundo Fulgencio, quien entró por Thauvin, y mandó su remate de volea a la banda.
En el segundo tiempo, Tigres tomó el dominio del partido y acarició el gol con un disparo de Rafael Carioca a la base del poste, pero Pumas respondió con un contragolpe fallido de Washington Corozo.
Con el paso de los minutos, Tigres fue arrinconando a los Pumas, pero sin claridad, mientras los capitalinos contestaron con un disparo de Dinenno que exigió a Nahuel a enviar a tiro de esquina.
En los minutos finales, Gignac habilitó a Jesús Dueñas, quien tiró por un lado, y al 90’ Gignac reventó el travesaño de Alfredo Talavera, en lo que pudo ser el gol de la diferencia.
El grito de gol se contuvo, pero no los abucheos hacia la cancha, donde varios jugadores de Tigres y Herrera, rodearon al árbitro Óscar Macías para reclamarle, mientras Higor Meritao agradecía hincado por llegar a 8 puntos, por 14 de los del “Piojo”.