¡Calor y maratonistas!
La elevación de la temperatura corporal es una de las principales causas de la fatiga
El cuerpo de un atleta genera calor al correr. Ese calor debe disiparse hacia el exterior para evitar que se acumule en el organismo, ya que en la medida en que eso ocurra se elevará su temperatura corporal.
La temperatura ideal para correr un maratón es de 12 grados centígrados y si la temperatura corporal es de 37 grados, esa diferencia de 25 grados permite que el calor generado se disipe con rapidez suficiente para evitar que el calor se acumule.
Cuando la temperatura ambiente es alta, como en el caso del maratón olímpico de Sapporo donde la temperatura fue de 30 grados, ese diferencial se reduce fuertemente y frena la disipación del calor, acelerando su acumulación.
Otro punto es que el torrente sanguíneo recoge el calor generado al correr y lo lleva a la piel en forma de sudor, que al evaporarse se disipa hacia el exterior.
Pero cuando la humedad del ambiente es alta se impide que el sudor se evapore y el calor generado no se disipa por esta vía, sumándose a su acumulación.
Un factor más que incide en la acumulación del calor corporal es la radiación solar, que introduce calor al organismo, que si bien no fue mucha en el caso de Sapporo, por correrse temprano, también contribuyó a acumular calor corporal.
CONTROL DEL CALOR GENERADO
Una característica de la fatiga generada por la alta temperatura corporal es que no se percibe en sus etapas iniciales. Se presenta de manera súbita al alcanzar cierto nivel, y el rendimiento atlético baja necesariamente.
Aquí debe decirse que la cantidad de calor que se genera al correr depende del esfuerzo que haga el competidor.
Quien no tenga la condición física de los líderes del maratón y quiera correr junto con ellos tendrá que hacer un mayor esfuerzo y generará más calor.
Por el contrario, quien tenga una buena condición física y no tenga que hacer un esfuerzo tan grande, podrá mantener su paso durante más tiempo e incluso correr la segunda mitad más rápido que la primera.
EN SÍNTESIS
La mejor opción que tiene un corredor para controlar la acumulación de su calor corporal es administrar de manera realista su paso de carrera, entendiendo que si va más rápido de lo que su capacidad le permita, al inicio del maratón, lo llevará a registrar un resultado más pobre.