Azota sequía al ganado; mueren. Se agudiza mortandad de animales
Los productores han perdido el 10% de animales por falta de agua y comida
Díaz Ordaz, Tam.- La falta de pastos verdes en los ranchos ganaderos, en donde la falta de agua ha convertido las praderas en zonas áridas, en donde la vida para los animales es imposible, si no son alimentados con pacas, u otros tipos de nutrientes, ya están cobrando víctimas, ante la impotencia de los productores de carne, en su gran mayoría de bajos ingresos.
Los ganaderos de bajos ingresos, a los que no les ha llovido en mucho tiempo, están viendo con tristeza e impotencia, cómo mueren sus animales por inanición y sed.
“Los hemos tratado de ayudar con algunos medicamentos, con la esperanza de que puedan levantarse y aguantar mientras llegan las lluvias, o recursos propios, porque por parte del gobierno, no esperamos nada”, externó el Presidente de la Asociación Ganadera General “San Miguel”, Martín García Magdaleno.
Si bien es cierto que las pasadas lluvias, llegaron a un amplio sector de ranchos ganaderos, en otras áreas, no llovió nada, y la seguía sigue generando estragos entre los animales.
Dijo que en su caso, como muchos otros de sus compañeros de bajos ingresos, a causa de la ausencia de lluvias, han perdido alrededor del 10 por ciento de sus hatos, al no tener comida en los campos, mucho menos agua en las presas, los animales mueren, tanto vacas como becerros, y eso entristece y a la vez desalienta a algunos productores de carne, pero no hay más opción que seguir adelante.
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“En donde no ha llovido, los campos están desérticos y en los que todavía tienen alguna que otra hierba, el pasto está totalmente seco, sin nutrientes que aporten a que los animales puedan mantenerse con peso y energía, o sea que es como si no comieran los animales”, indicó el dirigente ganadero.
Los que tienen los medios necesarios, han estado adquiriendo pacas, arrimando nopal chamuscado para los animales, u otros alimentos, que ayudan a las reses a apalear esta intensa sequía, que de prolongarse, continuará generando más mortandad, entre los ganaderos de bajos ingresos, que como siempre son los más vulnerables, ante las emergencias.
NO HAY MEDIOS
Por más que quieran algunos productores, no tienen los medios para acarrear a sus ranchos, y comprar alimento para sus hatos, y esa es la razón de tanta muerte,
Sin embargo, lo peor podría estar por venir, si no se registran lluvias en los ranchos ganaderos en donde las precipitaciones no llegan desde hace meses.
La próxima llegada de la canícula, no es una buena noticia para los productores de bajos ingresos, porque si ésta transcurre sin lluvias, la temperaturas extremas, sin duda alguna, provocarán más muertes de animales, sin que sus dueños puedan hacer nada por mantenerlos vivos.
Anteriormente, los ganaderos, cuando menos tenían un apoyo por parte del gobierno federal, que les entregaba apoyos, que si bien es cierto no eran suficientes, cuando menos los permitían minimizar los estragos causados por adversidad natural.
Lamentablemente, tal parece que para el nuevo gobierno federal, los ganaderos del sector social no existen, pues en vez de mejorar los subsidios, como se comprometió en campaña Andrés Manuel López Obrador, por el contrario, desapareció los apoyos, que Enrique Peña Nieto, había limitado.
Con la trilla del sorgo, los agricultores comenzaron a fabricar pacas con la zoca de ese cultivo, pero ese forraje se está comercializando muy caro, pues los sorgueros saben que ante la emergencia, pueden vender más caro ese alimento.
García Magdaleno, comentó que él adquirió unos pocos rollos de zoca de sorgo, para mantener a sus animales, los cuales le costaron a 300 pesos cada uno, porque se “los dejó baratos un amigo”, pero no todos los ganaderos tienen esa posibilidad.
En estos momentos de la sequía, los sorgueros están comercializando los rollos de zoca, hasta en 400 pesos, pues saben que los ganaderos necesitan de ese forraje para mantener y evitar que sus hatos se sigan diezmando.
ANIMAL VITAMINADO
“Quizá algunas gentes lo hagan, pero yo no, porque vender la carne de un animal que ya fue vitaminado o vacunado para tratar de mantenerlo con vida, puede provocar enfermedades a los consumidores, por lo que no es recomendable comercializar un res que pereció por hambre o enfermedad”, recalcó el dirigente ganadero.
Para tranquilidad de los consumidores de la región, el entrevistado, mencionó que al menos él y sus compañeros ganaderos que él conoce, por ética y responsabilidad, no venden los animales que se les mueren, porque eso sería no respetarse a ellos ni dignificar su actividad.
Se sabe que en ciudades grandes, como Reynosa, algunos taqueros han utilizado animales que antes de morir habían sido medicados, y las consecuencias es que a los consumidores, les pueden dar dolor de estómago, vómitos, fiebres u otros enfermedades.
Además., los animales que mueren por inanición, generalmente no tienen carne suficiente ni la grasa natural, por el contrario además de hueso, los nervios o músculos, sobre salen más, por eso la mejor forma de comercializarla para que los consumidores no se percaten de la mala calidad del alimento, es picada en tacos, con las consecuencias que pueden generar para quienes se las coman.