En viejos colchones ruñidos por los años, arrullados por el ruido de los motores de los vehículos que transitan por la Carretera 35, así transcurren los días para 18 desamparados, uno de ellos una mujer embarazada, que han tomado un puente bajo la Interestatal para convertirlo en su hoga
Viven bajo un puente
En viejos colchones ruñidos por los años, arrullados por el ruido de los motores de los vehículos que transitan por la Carretera 35, así transcurren los días para 18 desamparados, uno de ellos una mujer embarazada, que han tomado un puente bajo la Interestatal para convertirlo en su hoga
Laredo, TexasForman parte de la realidad que viven casi mil 800 personas en la indigencia, sin una casa y un sustento seguro, y quienes para la mayoría de la gente son invisibles pues muy pocos se detienen para darles algo más que una moneda.“Se trata de personas normales que por alguna razón se quedaron en el desamparo, algunos por desempleo, otros por problemas de adicciones, ellos son parte de nuestra sociedad, nos guste o no”, dijo José Ceballos, presidente de la Coalición para Desamparados en Laredo.Consideró lamentables las condiciones en que viven estas personas, que decidieron refugiarse en el puente ubicado bajo la Carretera 35 entre las calles Chicago y Ugarte y donde duermen en colchones que encontraron en la basura.“No tienen dónde asearse, tampoco tienen dónde hacer sus necesidades y se han convertido en un problema que necesitamos resolver mediante una intervención directa y bien organizada”, afirmó Ceballos.Agregó que cuando menos la mitad de los 18 desamparados que viven bajo el puente de la 35 tienen problemas de drogadicción y algunos usan drogas baratas como el K-2 para hundirse en la inconsciencia y olvidar por un rato su triste realidad.