Cd. Victoria, Tam.- La pandemia por la Covid-19 será el hecho histórico que marcará el inicio de la década del 2020, sin embargo, hace más de cien años otra pandemia envolvió al mundo, la gripe española, la cual sólo en la capital de Tamaulipas costó el cinco por ciento de su población en un breve lapso, y en el siglo XIX la Fiebre Amarilla tomó varias décadas para ser controlada.
“Estaríamos hablando de que sí hubo cerca de mil muertos aquí en Ciudad Victoria, y en lo que corresponde a Tamaulipas muchos -más sobre todo en Nuevo Laredo y en Tampico-, fue una cosa terrible la Gripe Española”, recordó el cronista victorense, Francisco Ramos Aguirre, “para estas fechas lo que sí ya se presentó y hubo unos rebrotes hasta el 1919 y más o menos hasta el 1920 hasta que se calmó un poco esa situación, que desapareció por completo”.
La gripe española fue una enfermedad altamente mortífera, en un lapso de tan solo tres meses -de agosto a noviembre de 1918- produjo mil muertos en una población de cerca de veinte mil habitantes -equivalentes al cinco por ciento-; mientras que la Covid-19, en casi ocho meses desde su inicio, ha arrojado la cantidad de cuatro mil 47 decesos en una población de 367 mil 770 habitantes, lo cual equivale a un 1.1 por ciento.
“Lo que sí me sorprende es que esta pandemia se ha extendido demasiado comparada históricamente con otras que si bien se controlaban durante varios meses había un pequeño rebrote al tiempo, pero esta sí es una pandemia muy prolongada en este caso”, el ferrocarril fue la vía de propagación para la gripe española a lo largo de ciudades como Nuevo Laredo, Victoria, Monterrey y Tampico a finales de la segunda década del siglo XX.
Pero aún antes, en el siglo XIX, Tamaulipas y el mundo fueron víctimas de la Fiebre Amarilla, “fue una enfermedad que duró casi todo el siglo XIX, gran parte del siglo XIX para poderla controlar, pero eran otros tiempos y otros escenarios y contextos de, por ejemplo de la medicina y los médicos que ya existían pero que no eran suficientes”, como medida innovadora en aquella época se instalaron filtros sanitarios en los principales caminos que conectaban a Victoria con el resto de la región para impedir brotes en los municipios vecinos.