CARACAS — Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela y jefe de la delegación del gobierno de Maduro en las negociaciones, indicó que la incorporación de Saab será remitida al Reino de Noruega, que actúa como facilitador de los diálogos, pese a la situación jurídica que vive el empresario en la nación africana.
Rodríguez comentó que Saab —a quien Caracas designó embajador plenipotenciario de Venezuela en África— fue detenido de “manera ilegal” en Cabo Verde en junio de 2020. Refirió que su detención se dio cuando su jet privado hizo una escala para reabastecerse de combustible en la antigua colonia portuguesa en ruta a Irán, en lo que el gobierno venezolano ha descrito como una misión humanitaria.
Rodríguez destacó que Saab fue incorporado ”con plenas funciones” como delegado “ante la Mesa Social que fue aprobada en el Acuerdo Parcial de atención al pueblo de Venezuela, firmado en México”.
La Corte Constitucional de Cabo Verde rechazó por unanimidad la apelación de Saab presentada después de que otro tribunal en ese país africano aprobase su extradición cinco meses atrás. Era la última esperanza de Saab para evitar un juicio en Estados Unidos.
Se desconocía de momento si Saab contaba con algún otro recurso jurídico o cuándo sería puesto en un avión rumbo a suelo estadounidense.
Los abogados defensores de Saab argumentan que el empresario era un enviado diplomático del gobierno venezolano y que en esa calidad tiene inmunidad frente a acciones legales durante su misión oficial.
No está claro si la designación se materializará en algún momento dada la situación legal que enfrenta el empresario colombiano, la cual depende de otros actores políticos y jurídicos ajenos al gobierno de Venezuela.
Rodríguez, empero, aseveró que Saab como diplomático está “perfectamente capacitado para formar parte como miembro pleno de la delegación”.
El empresario colombiano también sería parte de la comisión a cargo de exigir la devolución de activos del Estado Venezolano, que están bajo control de la oposición tras las sanciones que impuso Estados Unidos.
La suspensión de las sanciones económicas y el descongelamiento de los activos de Venezuela en el extranjero son algunos de los temas centrales de discusión para el gobierno de Maduro, aunque es la administración del presidente estadounidense Joe Biden la que tendría la última palabra al respecto.
Los diálogos en México entre delegados del gobierno y grupos opositores aliados del dirigente Juan Guaidó se retomaron a partir del 3 de septiembre. Es un proceso que, además de Noruega, es respaldado por Estados Unidos, la Unión Europea y Canadá, entre otros países, que han expresado su disposición a revisar las sanciones contra la administración de Maduro en el caso que se evidencien progresos.
La primera ronda se produjo tres semanas después de la firma de un memorando de entendimiento el 13 de agosto que marcó el arranque del proceso, el cual se extenderá al menos seis meses.
Fiscales federales en Miami procesaron formalmente a Saab en 2019 bajo cargos de lavado de dinero en relación con una supuesta trama de sobornos con la que se embolsaron más de 350 millones de dólares de un proyecto del gobierno venezolano con el que se construirían viviendas para personas de bajos ingresos.
El gobierno del ahora expresidente estadounidense Donald Trump convirtió en una prioridad la extradición de Saab e incluso envió en su momento una embarcación de la Marina al archipiélago africano para mantener vigilado al detenido.