La Comisión Permanente del Congreso pidió a la Secretaría de Relaciones Exteriores que despliegue mayor protección a los mexicanos que viven en Texas, Estados Unidos, luego de la entrada en vigor de una ley que prohíbe las ciudades santuario para migrantes.
Urgen mayor protección a paisanos en Texas
La Comisión Permanente del Congreso pidió a la Secretaría de Relaciones Exteriores que despliegue mayor protección a los mexicanos que viven en Texas, Estados Unidos, luego de la entrada en vigor de una ley que prohíbe las ciudades santuario para migrantes.
Por medio de un punto de acuerdo, el pleno de la Comisión Permanente condenó la promulgación en Texas de la Ley SB4, por considerar que atenta contra la dignidad de las personas y fomenta la xenofobia y discriminación racial.La ley fue promulgada el pasado 7 de mayo por el Gobernador de Texas, Greg Abbott, y antes fue aprobada por la Cámara de Representantes y el Senado.Además de prohibir las ciudades santuario, dicha ley autoriza a agentes policiacos del estado a requerir a personas detenidas documentación sobre su estatus migratorio.La Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión exhorta respetuosamente a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que, a través de la Red Consular en el estado de Texas, refuerce las labores de asistencia legal y protección consular a las personas migrantes mexicanas, cita la propuesta aprobada por diputados y senadores.Explica que la norma puede ser dañina para los mexicanos que residan en ese estado, por lo que el Gobierno mexicano debe responder con una posición firme.La Ley en comento contiene elementos que podrían ser lascivos para los derechos de las personas migrantes mexicanas residentes en Estados Unidos, por lo que considera de vital importancia asumir una posición firme de defensa de sus derechos humanos, menciona el acuerdo aprobado por unanimidad del pleno.El acuerdo advierte que la Ley SB4 vulnerará en el corto plazo los derechos de los connacionales en Estados Unidos, por lo que se debe reforzar la defensa integral de los cerca de 2 millones de mexicanas que viven en ese estado de la Unión Americana.Los legisladores encargados de la elaboración del presente dictamen están de acuerdo en que el Congreso de la Unión debe pronunciarse en contra de este tipo de leyes racistas y discriminatorias, que atentan directamente contra la dignidad humana y contra los derechos fundamentales de las personas migrantes mexicanas, se agrega en el documento aprobado.En contraparte, el punto de acuerdo alaba la decisión de diversas localidades en Estados Unidos de declararse ciudades santuario de migrantes.También se hace un reconocimiento a la labor de abogacía que llevan a cabo organizaciones civiles humanitarias en la defensa de los derechos de las personas migrantes mexicanas residentes en esa nación.