Con tres goles en la recta final del partido, el Manchester United derrotó 4-1 al Newcastle United y consiguió su segundo triunfo de la temporada.
Los “Red Devils” vinieron de atrás, luego de que rápidamente, al minuto 2, se encontraron en desventaja gracias a un autogol del lateral Luke Shaw.
Tiempo después, al 23’, Harry Maguire se levantó y emparejó el marcador con un cabezazo.
En los últimos cuatro minutos del duelo se vino la tormenta de los escarlatas. Primero al 86’, cuando Bruno Fernandes se sacó la espina tras fallar un penal y definiera en linderos del área chica luego de que Marcus Rashford le dejara el balón.