ÁMSTERDAM — En un comunicado emitido el lunes, la agencia reguladora de medicamentos de la Unión Europea indicó que está considerando si debe proporcionarse una tercera vacuna seis meses después que la población de 16 años en delante haya completado su esquema con dos dosis, “para recobrar la protección una vez que haya menguado”.
Los expertos de la EMA realizan una “evaluación acelerada” de los datos proporcionados por Pfizer y BioNTech, incluyendo los resultados de una prueba experimental en curso en que cerca de 300 adultos sanos recibieron un refuerzo aproximadamente seis meses después de su segunda dosis.
Pfizer de antemano ha presentado una petición a la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) para la autorización de una tercera dosis y el gobierno estadounidense señaló el mes pasado que las dosis de refuerzo probablemente estarían disponibles para finales de septiembre. Israel ya ha empezado a aplicar refuerzos y el plan se encuentra bajo consideración en otros países, entre ellos Francia y Alemania, para su población vulnerable.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha exhortado a los países ricos no aplicar refuerzos al menos hasta finales de septiembre, argumentando que no existen datos científicos que demuestren en una tercera inyección es necesaria. Agregó que las vacunas contra el COVID-19 deberían ser administradas mejor en países en vías de desarrollo, los que han recibido menos de 2% de las más de 5.000 millones de dosis aplicadas.
La EMA, con sede en Ámsterdam, detalló que espera tomar una decisión sobre recomendar o no una tercera dosis de la vacuna de Pfizer en las próximas semanas.