Trunca accidente la carrera de luchador

Terrible percance vial cambió su vida por completo.

Kuman Junior, es un entusiasta joven que inició su carrera en la lucha libre a la edad de 18 años, motivado por el ejemplo de su padre, el exitoso luchador Kuman Rey de la Selva, quien siempre lo ha inspirado en ser mejor persona y sobretodo, triunfar en esto que le apasiona, la lucha libre. Tiene entre sus satisfacciones logros como el haber sido campeón estatal de peso Welter y por su dedicación y buenas luchas fue imagen de importante revista de lucha libre, asimismo lleva una cabellera, la del aguerrido luchador Black Boy, y una máscara, la del temible Arácnido, fuertes contrincantes. Kuman Junior, ha demostrado su potencial en el pancracio, luchando en lugares como Río Bravo, Nuevo Progreso, Matamoros, Reynosa, Díaz Ordaz, Camargo, Victoria, Miguel Alemán, Aldama, Tampico, y Monterrey entro otros, lo que más disfruta al subir al cuadrilátero es que la gente empiece a corear su nombre o que las personas que no lo conocen, pero igual disfrutan de su talento en la lucha libre le griten en coro “técnico”. Fue en el año del 2014, cuando un terrible accidente automovilístico cambió su vida, el luchador cuenta que gracias a Dios, de puro milagro está vivo, este suceso lo dejó en coma durante 7 días, estuvo internado casi 30 días en el IMSS de Reynosa, con una parálisis en su lado derecho, el diagnóstico del médico no era nada favorable, pues le dijeron que jamás se iba a poder levantar de una cama, que no iba a moverse y nunca más a volvería a pisar un ring, noticia que lo hizo soltar en llanto, pero nunca perdió la fe de que se recuperaría. Por 3 largos meses no pudo moverse, fue entonces que comenzó una terapia física en la cual su padre le animaba y apoyaba siempre ayudándole a hacer cada ejercicio, mañana, tarde y noche. Al respecto Kuman Junior cuenta que su padre ha sido su coach tanto en la lucha libre como en su vida personal, gracias a la motivación que le daba su progenitor no sufrió depresión, pues hacía que se le olvidara que no estaba sano físicamente. Más de 40 Luchadores  de muchos lugares de México y Estados Unidos de Norteamérica, al enterarse de lo que le había pasado, decidieron visitar la ciudad de Río Bravo, para ofrecer funciones a favor de la recuperación de este joven, cuentan espectadores que fue un evento muy emotivo, pues nunca se había visto que estos apoyaran de esa manera a un compañero. Actualmente fue dado de alta, ya puede moverse, pero aún quedan secuelas del accidente en su cuerpo, le es imposible luchar, pero este gran joven, sueña con muy pronto regresar al Pancracio, por que subirse a un ring, dice, es su vida. Poco a poco se está recuperando y le dice a los jóvenes que quizá se encuentren en la misma situación que él, “Que le echen ganas, sigan adelante, mientras haya vida, hay esperanza”.