Ricardo Ward demanda al gobierno información sobre el paradero de la escultura del doctor Rafael Lucio que desapareció de Reforma en 2010
Tras las pistas de monumento perdido
Ricardo Ward demanda al gobierno información sobre el paradero de la escultura del doctor Rafael Lucio que desapareció de Reforma en 2010
Ciudad de México Todos los jueves desde hace más de un año, en el zócalo vacío de la desaparecida escultura dedicada al doctor Rafael Lucio aparece un ramo de flores. La estatua de finales del siglo XIX, obra del escultor Epitacio Calvo, se esfumó de la avenida Reforma hace unos siete años, después de un aparatoso accidente que la hizo caer de su pedestal. Desde entonces, nadie ha vuelto a verla ni se tiene noticias de ella. Pero a partir de abril del año pasado, Ricardo Ward comenzó a seguirle las pistas y, a manera de homenaje, deposita una ofrenda floral cada semana en el único vestigio que queda de la pieza. Todo comenzó cuando un jueves de abril de 2016, el joven etnólogo, vecino de la colonia Juárez, cruzó la avenida frente al hotel Krystal, en Reforma y Bucareli. Después de sortear el flujo de los automóviles en la vía, tropezó con el pedestal de la escultura del ilustre médico veracruzano, célebre por sus investigaciones sobre la lepra que, durante la segunda mitad del siglo XIX, azotaba a la población del país. A la mente de Ward vino un recuerdo de su infancia, cuando un día pasó por ese mismo lugar con su padre y notó algo en la estatua que llamó tanto su atención: el médico sostenía en sus manos el cráneo seccionado de un niño. Tras notar la ausencia de la escultura, su reacción inmediata fue parar una patrulla y denunciar su desaparición. Lo que no sabía es que, en realidad, la escultura había desaparecido desde finales de 2010. A partir de entonces, en homenaje a este médico progresista del siglo XIX, y en recuerdo de su “negligencia ciudadana”, porque tardó en enterarse de la desaparición, deposita un ramo de flores cada semana en ese espacio vacío. Por iniciativa propia y en sus redes sociales se ha dedicado a tocar las puertas de las instancias locales y federales encargadas de la protección del patrimonio histórico o mobiliario urbano para indagar sobre su paradero y exigir que se reponga una réplica. “No he logrado demasiado, pero me parece que por lo menos hay más gente que está enterada de esto y he logrado hacer conciencia de que algo falta, de que algo está mal, de que no es normal que esté ese zócalo vacío ahí”, dice el joven que, todos los jueves, en su cuenta de Twitter, con el hashtag #EstatuaDrLucio, comparte fotografías de su homenaje semanal. La instancia, a cargo de Gabriela López Torres, comenta que el pasado 3 de julio se llevó a cabo una reunión con especialistas de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH, donde ya se habló de los procesos a seguir para realizar la réplica de la escultura histórica. Por su parte, la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse), que es la encargada de la construcción de la nueva línea del Metrobús en Reforma, informa que en el proyecto de restauración que presentará en los próximos días al INAH para su aprobación ya se contempla la restitución de la pieza.