En Nuevo León han desaparecido al menos cinco mil 475 personas, mientras la Fiscalía Especializada para tratar de localizarlos, apenas cuenta con cuatro agentes, en tanto la Comisión Local de Búsqueda dispone de un pequeño equipo de ocho personas para realizar labores de campo y administrativas, afirmó la investigadora del Ciesas Noreste, Séverine Durin.
Agregó que, entre todos esos casos, que se han ido acumulando de 2007 a la fecha, solamente se ha emitido una sentencia condenatoria por desaparición forzada, ante lo cual, señaló, se configura una situación de impunidad absoluta, y preguntó si “¿esto no es un permiso para desaparecer personas?”.
La investigadora comentó lo anterior durante la mesa redonda “Crisis de desapariciones en Nuevo León”, que se organizó para exigir a las autoridades la búsqueda y localización de Mayela Álvarez, secretaria técnica de la maestría en Antropología Social del Ciesas Noreste, que fue desaparecida en agosto 11 de 2020.
Esto es parte de una realidad indignante que a escala nacional inició hace 15 años (2006), y que a la fecha nos tiene buscando a más de 90 mil personas desaparecidas. En este problema, Nuevo León, es cuarto lugar entre los estados del país, con cinco mil 475 víctimas de desaparición.
Además, dijo Durin, hay muchas personas originarias de Nuevo León que fueron desaparecidas en Tamaulipas, segundo estado del país con más desaparecidos, después de Jalisco que ocupa el primer lugar.
La académica del Ciesas puntualizó que la crisis de las desapariciones ha ido aparejada con el aumento en los homicidios dolosos, que inició en la entidad con la llamada guerra contra el narcotráfico, presentándose un pico muy alto entre 2009 y 2012, que después de una disminución, volvió a crecer de manera muy importante a partir de 2017 y sigue hasta la fecha.
ZONA PELIGROSA
Puso como ejemplo las recientes desapariciones por la carretera Monterrey-Nuevo Laredo, ante lo cual preguntó Durin si hay permiso para desaparecer personas, y cuestionó qué es lo que hace que se sigan perpetrando las desapariciones.
Las víctimas de desaparición de 2000 a la fecha en el país, comentó Durin, son mayormente varones en una proporción de 70 a 30 por ciento frente a las mujeres, aunque en Nuevo León es poco mayor la proporción de mujeres comparado con otros estados. Agregó que los hombres que más desaparecen son jóvenes y adultos jóvenes de hasta 40 años, mientras las mujeres son principalmente niñas y adolescentes, en un rango de cinco a 19 años de edad.
Frente a la crisis de las desapariciones, asentó Durin, hay una clara insuficiencia de recursos humanos y tecnológicos, pues por ejemplo la Fiscalía Especializada para Personas Desaparecidas cuenta solo con cuatro agentes, es decir un agente por cada mil 368 víctimas de desaparición que se deben localizar.
En ese contexto recordó la ubicación de fosas y sitios de exterminio donde han sido encontrados miles de restos óseos que es necesario analizar.