Récord de naturalizaciones y caos: Eclipsa la frontera los logros de Biden

En los cuatro años de su mandato firmó 605 órdenes ejecutivas en esta materia, más que las 472 aprobadas por Trump, que ostentaba el récord

La estrategia elegida por Donald Trump, durante la campaña de enfocarse en la política migratoria, fue efectiva y le recompensó con una victoria abrumadora. El discurso de que el país vive una crisis histórica por la llegada masiva de migrantes caló hondo en el electorado, y el presidente, Joe Biden fue criticado por ambos lados del espectro político, en parte, por no actuar. Sin embargo, un informe recién publicado por el Instituto de Política Migratoria, que ha registrado cada medida adoptada por las distintas Administraciones, muestra que Biden fue el presidente más activo de la historia en materia migratoria. En los cuatro años de su mandato firmó 605 órdenes ejecutivas en esta materia, más que las 472 aprobadas por Trump, que ostentaba el récord.

Según sus autores, han sido muchos los logros de la Administración Biden, pero han estado eclipsados por los problemas en la frontera, bien explotados por el republicano. Por un lado, los conservadores denunciaron que una política laxa de fronteras abiertas provocó la entrada de migrantes indocumentados; por otro, los abogados de los migrantes reclamaron que no hizo lo suficiente para abrir un camino a la legalidad de millones de indocumentados.

"Los defensores de los derechos de los inmigrantes afirmaron que las políticas fronterizas de Biden duplicaron el enfoque de Trump. Y los conservadores denunciaron que la estrategia de la Administración invitaba al caos al permitir que millones de personas llegaran sin autorización a Estados Unidos", recoge el estudio.

El demócrata llegó al poder con la promesa de derrumbar una política migratoria que consideraba cruel e inhumana, caracterizada por la deportación de migrantes indiscriminada y la separación de familias que dejó a miles de niños sin progenitores que los cuidaran. Para Muzaffar Chishti, coautor del informe, uno de los logros de Biden fue ponerle fin. "Yo veo el legado de un presidente en cómo afecta a la vida diaria de la gente. La Administración Biden consiguió cumplir una política de aplicación de la ley por la que a menos que se fuera un delincuente grave, una amenaza para la seguridad nacional o un recién llegado, nadie debía tener miedo de ser deportado. Eso es lo opuesto al legado de la Administración anterior, donde todos eran blanco por ser extranjeros". Según sus datos, los migrantes indocumentados de larga duración tienen con Biden un 80% de posibilidades de no ser deportados.

La intención de Trump es recuperar las políticas que Biden terminó y realizar la mayor deportación de la historia, expulsando del país a más de 11 millones de indocumentados. Entre ellos se cuentan los solicitantes del TPS (Estatus de Protección Temporal, por sus siglas en inglés) y los beneficiarios de DACA, el programa que concede la residencia temporal a quienes llegaron de forma ilegal siendo niños, los dreamers. Para estos últimos, Trump ha dicho que trabajará con los demócratas para buscar una solución, aunque los propios dreamers y sus defensores son muy escépticos de que lo cumpla.

´UNA GUERRA NARRATIVA´

En mayo, el presidente anunció medidas para restringir drásticamente el asilo, lo que ha llevado a que en el año fiscal 2024 la Patrulla Fronteriza haya registrado 1,5 millones de encuentros en la frontera con México, la menor cantidad desde el año fiscal 2020. Pero ya era tarde a ojos de los electores, que llevaban meses oyendo el discurso antiinmigración. La negativa a reconocer que había una crisis y la tardanza en aprobar medidas son las mayores críticas a la Administración de Biden, lo que se tradujo en la victoria de Trump en las elecciones.

"El círculo íntimo de Biden, sus asesores políticos y de comunicación, no entendió que se trataba de una guerra narrativa. Se negaron a llamarla crisis, cuando eso es lo que los votantes estaban viendo en sus pantallas, ya sea en sus iPhones o en las de televisión. Se quedaron en silencio y no priorizaran la inmigración, sembrando las semillas de los ataques, que tenemos ahora, y dejando que nos condujeran a donde estamos", señala Marielena Hincapié, abogada especialista en temas migratorios.