AUSTIN, Texas.- El gobernador Greg Abbott, el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) y la Guardia Nacional de Texas continúan trabajando juntos para proteger la frontera, detener el contrabando de drogas, armas y personas a Texas y prevenir, detectar e interceptar la actividad criminal transnacional entre los puertos de entrada.
Abbott emitió una declaración a principios de esta semana tras la decisión del Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Quinto Circuito que permite a Texas mantener sus barreras marinas flotantes en el río Grande.
"El Quinto Circuito entregó una victoria a la histórica misión de seguridad fronteriza de Texas, al dictaminar que nuestras barreras marinas flotantes pueden permanecer en el río Grande. El año pasado, Texas instaló estas barreras para negar los cruces peligrosos e ilegales del río y, casi de inmediato, la administración Biden-Harris presentó una demanda para eliminarlas y obstruir nuestros esfuerzos por asegurar nuestra frontera. Luchamos para mantener estas barreras en el agua y, con la decisión del Quinto Circuito, ahí es exactamente donde permanecerán".
Abbott emitió una declaración detallando la continua negativa de la vicepresidenta Harris a abordar la crisis fronteriza. El gobernador también destacó una carta que le envió a la vicepresidenta poco después de que el presidente Biden la nombrara zar fronteriza hace más de tres años, instándola a visitar la frontera para ver la crisis por sí misma y tomar medidas rápidas para asegurar la misma.
Desde el lanzamiento de la Operación Estrella Solitaria, el esfuerzo de varias agencias ha llevado a más de 517.000 detenciones de inmigrantes ilegales y más de 45.700 arrestos criminales, con más de 39.600 cargos por delitos graves. En la lucha contra la crisis del fentanilo, las fuerzas del orden de Texas han incautado más de 506 millones de dosis letales, suficiente para matar a todos los hombres, mujeres y niños en los Estados Unidos y México juntos.
Cada individuo que es detenido o arrestado y cada onza de drogas incautada, de otra manera, habría llegado a comunidades de todo Texas y la nación debido a las políticas de frontera abierta del presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris.
"Hace más de tres años, envié una carta a la vicepresidenta Harris", dijo el gobernador. "Le imploré a la vicepresidenta, en su calidad de persona clave del presidente Biden en materia de inmigración ilegal, es decir, la zar de la frontera, que tome medidas rápidas para abordar nueve preocupaciones urgentes, entre ellas, tomar medidas enérgicas contra la trata de personas y evitar que más niños sean víctimas de trata y abuso como resultado de la crisis fronteriza.