Austin, TX.
La policía estatal de Texas no disciplinará a más oficiales por el tiroteo en la escuela Uvalde que dejó 19 niños y dos maestros muertos cuando agentes fuertemente armados dudaron en confrontar al pistolero solitario, confirmó un portavoz de la corporación.
La decisión es un punto de inflexión casi nueve meses después de uno de los peores ataques escolares en la historia de los EU y la indignación generalizada por los oficiales que dejaron pasar más de 70 minutos antes de detener la masacre.
También plantea nuevas preguntas sobre cuántos de los casi 400 miembros del personal policial que estuvieron en la Escuela Primaria Robb en mayo pasado podrían enfrentar medidas disciplinarias. Vinieron de una constelación de agencias en el sur de Texas, incluido el Departamento de Seguridad Pública de Texas, la Patrulla Fronteriza de EU y la policía local. Dos agentes del DPS han sido despedidos y uno de ellos está apelando su despido.
En total, se sabe que cinco oficiales en Texas que estaban en la escena ese día fueron despedidos o renunciaron.
La policía estatal tenía 91 oficiales en la escena, más que cualquier otra agencia de aplicación de la ley. Travis Considine, un portavoz del departamento, confirmó el viernes que cuatro de los siete oficiales puestos bajo revisión interna después del tiroteo fueron absueltos de irregularidades.
El director de DPS, Steve McCraw, le dijo a The Dallas Morning News que nadie más enfrentaría medidas disciplinarias. “Solo los dos”, dijo McCraw.
PASMADOSLos oficiales en la escena esperaron más de 70 minutos antes de que un equipo finalmente irrumpiera en un salón de clases de cuarto grado y se enfrentara al hombre armado de 18 años, que estaba armado con un rifle estilo AR-15 y disparó más de 140 rondas dentro de la escuela. según un informe de investigación de los legisladores de Texas.
El video de la cámara corporal, las imágenes de vigilancia de la escuela y los relatos de los testigos han dejado al descubierto la prolongada inacción de la policía y cómo ningún oficial se apresuró a detener el ataque. McCraw ha calificado la respuesta como un “fracaso abyecto”.
El primer oficial de DPS fue despedido en octubre. Otro de los siete renunció antes de que terminara la revisión y luego se unió al distrito escolar de Uvalde como oficial de policía del campus. Fue despedida menos de 24 horas después de que padres indignados en Uvalde se enteraran de su contratación.
El jefe de policía de la escuela de Uvalde en el momento del ataque fue despedido en agosto y el jefe interino de policía de la ciudad ese día renunció.
¡QUE RENUNCIE!- Varios padres de las víctimas exigen desde hace meses que renuncie el director de DPS, Steve McCraw.
- El representante republicano Tony Gonzales, cuyo distrito incluye a Uvalde, también dijo que McCraw debería irse.
- Pero el director de DPS desde hace mucho tiempo reiteró a los periodistas que planeaba quedarse en el trabajo.