Raleigh, Carolina del Norte
La mayor parte de la destrucción causada por un tornado el miércoles en una planta de la farmacéutica Pfizer en el este de Carolina del Norte se registró en su almacén, más que en sus áreas de producción de medicinas, informó la compañía el viernes.
La capacidad de la empresa para recuperar equipo de producción y otros materiales esenciales podría mitigar lo que los expertos temían que fuera un duro golpe a un sistema ya de por sí presionado, en un momento en que Estados Unidos padece escasez de ciertas medicinas.
"No prevemos que haya algún impacto significativo inmediato sobre el suministro, dado que los productos se encuentran actualmente en hospitales y en el sistema de distribución", dijo Robert Califf, comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés).
Un tornado categoría EF3 tocó tierra el miércoles cerca de la ciudad de Rocky Mount, arrancando el techo de una fábrica de Pfizer donde se producen casi el 25% de las medicinas inyectables estériles del gigante farmacéutico estadounidense usadas en hospitales de Estados Unidos, según la empresa.
Pfizer indicó el viernes que un almacén de materias primas, suministros para embalaje y medicamentos terminados listos para su envío había sufrido la mayor parte de los daños en su planta de 130.000 metros cuadrados (1,4 millones de pies cuadrados). En una inspección inicial realizada por la compañía no se hallaron afectaciones graves en sus áreas de producción de medicinas, y los 3.200 empleados locales están a salvo.
El presidente y director general de Pfizer, doctor Albert Bourla, dijo que el personal está enviando productos a sitios cercanos para su almacenamiento e identificando proveedores con el fin de reemplazar rápidamente las materias primas que se perdieron en la tormenta. La farmacéutica dice que también está explorando sitios alternos de manufactura en su red en Estados Unidos mientras la planta de Carolina del Norte permanece cerrada por reparaciones.