El jurado declaró competente y no enfermo mental al afroamericano Demond Depree Blunston, quien en junio de 2012 asesinó a su mujer y a sus dos hijos, entonces se sostiene la pena de muerte conseguida por el fiscal de Distrito el 5 de mayo del año 2019, sobre el triple asesinato del 19 de junio del 2012.
Isidro Alanís, agente del Ministerio Público del Estado, consiguió este lunes 9 de mayo, que se ratificara la pena capital, el castigo más severo en Texas, contra Blunton, quien en fecha por designar, será ejecutado mediante inyección letal, tal y como lo determina el Código Penal del Estado de Texas.
Blunston mató a balazos en su habitación del hotel Holiday Inn Civic Center de Laredo a su hijo de 21 meses de nacido y a su hijastro de 6 años, pero antes, en El Campo, Texas, poblado al sur de Houston sobre la carretera 59, asesinó a la madre de los dos pequeños, su mujer del ahora condenado.
Esta vez la defensa de Blunston trató de hacer pasar como alguien enfermo mental, una persona que no estaba bien de su raciocinio aquel día del triple homicidio.
Pero este lunes en la Corte de Distrito número 49, ante el juez Joe López, el jurado, después de escuchar profesionales, como psiquiatras, psicólogos, policías y otros especialistas, determinó que Blunton estaba cuerdo, en sus cinco sentidos; no padece alguna alteración mental.
Alanís, agente del Ministerio Público, con este caso consiguió la última pena de muerte en los últimos 25 años en las cortes criminales del estado.