Con la inflación cerca de ser derrotada y el mercado laboral enfriándose, la Reserva Federal de Estados Unidos está lista para empezar a reducir su tasa de interés clave de su actual máximo de 23 años, anunció el viernes el presidente del banco central Jerome Powell.
Powell no dijo cuándo empezarán los recortes a las tasas o qué tan grandes serán, pero se tiene previsto que la Fed anuncie una modesta reducción de un cuarto de punto en su tasa de referencia cuando se reúna a mediados de septiembre.
"Ha llegado el momento de ajustar la política", dijo Powell en su discurso de apertura de la conferencia económica anual de la Reserva Federal en Jackson Hole, Wyoming. "La dirección de la marcha está clara, y el calendario y el ritmo de los recortes de las tasas dependerán de los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el equilibrio de riesgos".
Su referencia a múltiples recortes de tasas fue el único indicio de que es probable una serie de reducciones, como han pronosticado los economistas. Powell subrayó que la inflación, después que el peor repunte de los precios en cuatro décadas afectara a millones de hogares, parece en gran medida bajo control.
"Mi confianza ha aumentado en que la inflación está en una senda sostenible de vuelta al 2%", subrayó.
De acuerdo con la medida preferencial de la Fed, la inflación disminuyó a 2,5% el mes pasado, respecto a su punto máximo de 7,1% alcanzado hace dos años y ligeramente superior al objetivo de 2% del banco.
El presidente de la Fed dijo también que los recortes de tasas deberían mantener el crecimiento de la economía y sostener la contratación, que se ralentizó el mes pasado. El crecimiento continuado podría impulsar la campaña presidencial de la vicepresidenta Kamala Harris, incluso cuando la mayoría de los estadounidenses se declaran insatisfechos con el historial económico del gobierno Biden-Harris, en gran parte porque los precios medios siguen muy por encima de donde estaban antes de la pandemia.