- NUEVA YORK, NY
La querella, interpuesta en un tribunal estatal, acusa a por lo menos 30 condados de Nueva York de pretender "amurallar sus fronteras" a los solicitantes de asilo mediante decretos "xenófobos" que violan la ley estatal y federal.
En los últimos meses, la ciudad de Nueva York se ha esforzado por atender la afluencia de solicitantes de asilo, convirtiendo hoteles y lugares de culto en refugios mientras el alcalde Eric Adams declaraba en repetidas ocasiones que la ciudad había alcanzado su límite para recibir personas. El mes pasado, la ciudad empezó a trasladar en autobús a decenas de inmigrantes a un puñado de hoteles al norte de la ciudad.
La medida desencadenó un aluvión de declaraciones de emergencia por parte de las autoridades locales, desde Long Island hasta la frontera canadiense. Las órdenes amenazaban con sanciones penales y económicas a la ciudad de Nueva York y a cualquier hotel u otro negocio que ayudara a reubicar a los inmigrantes.
Algunos funcionarios condales plantearon temor por la delincuencia o el hacinamiento, mientras que otros dijeron que no podrían permitirse atender a los inmigrantes si la ciudad dejaba de pagar las habitaciones de hotel.
"No estamos equipados para atender de forma humana a estas personas, algo que en algún momento tendremos que hacer", afirmó Ed Day, administrador republicano del condado de Rockland, uno de los primeros condados en recibir inmigrantes enviados por la ciudad de Nueva York.
El martes, en otra demanda, un juez federal dictó una orden preliminar que impedía al condado de Rockland y al condado de Orange implementar sus amplias órdenes de emergencia destinadas a prohibir la entrada de inmigrantes en los hoteles.