El alcalde de Nueva York anunció planes para enviar a cientos de solicitantes de asilo a dos hoteles al norte de la ciudad por hasta cuatro meses, para tratar de hacer frente a una oleada de llegadas, pero antagonizando con los funcionarios de la zona mayoritariamente suburbana.
El gobierno del alcalde demócrata Eric Adams dijo que hasta 300 hombres adultos solteros bajo el cuidado de la ciudad serán transportados de forma voluntaria a un hotel en Orangeburg, en el condado de Rockland, y a otro en Orange Lake, en el vecino condado de Orange. Adams ha criticado al gobernador de Texas, Greg Abbott, por enviar a solicitantes de asilo a Nueva York sin coordinación previa, y funcionarios que representan a las zonas al norte de la ciudad expresaron el viernes quejas similares contra Adams.
El alcalde también ha pedido en repetidas ocasiones más ayuda estatal y federal para hacer frente a la llegada de solicitantes de asilo, muchos de los cuales fueron enviados en autobús a la ciudad por gobernadores de otros estados. Afirmó que el programa ayudaría a la ciudad a manejar a los más de 37,500 solicitantes de asilo de los que se ocupa actualmente. El gobierno dijo que los hombres enviados a los hoteles recibirán comida, asesoramiento, apoyo jurídico y otros servicios.
“Este nuevo programa voluntario proporcionará a los solicitantes de asilo alojamiento temporal, acceso a servicios y conexiones con las comunidades locales mientras construyen una vida estable en el estado de Nueva York”.
Algunos funcionarios republicanos de zonas situadas al norte de la ciudad de Nueva York reaccionaron con dureza, diciendo que acababan de ser informados del plan y que la región carece de metro y de los servicios necesarios para gestionar una oleada de solicitantes de asilo.
El ejecutivo del condado de Rockland, Ed Day, calificó el plan del alcalde de “imprudente”.
“Esto es como dejar caer a una persona que no sabe nadar en medio del océano y esperar que le vaya bien”, dijo Day en una entrevista telefónica. Day indicó que el fiscal del condado estaba estudiando la posibilidad de obtener judicial. El administrador del condado Orange, Steve Neuhaus, se mostró conmocionado al conocer la noticia el viernes y dijo que seguía teniendo preguntas acerca de las llegadas.
“¿Quiénes son estos tipos? ¿Han sido debidamente investigados? ¿Qué van a hacer? ¿Van a estar merodeando por la ciudad?”, dijo Neuhaus en una entrevista telefónica.