OKLAHOMA CITY
Un juez federal de Estados Unidos concedió una petición el viernes para impedirle temporalmente a Oklahoma aplicar su nueva ley migratoria, la cual convertiría en delito vivir en el estado sin contar con estatus legal de inmigración.
El juez de distrito Bernard M. Jones emitió un interdicto preliminar solicitado por el Departamento de Justicia para que se aplique mientras se dirime su demanda que impugna la nueva ley, la cual habría entrado en vigor el lunes.
La demanda presentada en una corte federal en Oklahoma City impugna la medida, que convierte en delito estatal —punible hasta con dos años de cárcel— el vivir en Oklahoma si se carece de estatus legal de inmigración.
El Departamento de Justicia también está impugnando leyes similares aprobadas en Texas y Iowa. El Departamento de Justicia dice que la ley de Oklahoma infringe la Constitución federal, y le pidió a la corte que la declare inválida y le prohíba al estado implementarla.
La orden judicial del viernes dice que Oklahoma "podría tener frustraciones comprensibles con los problemas provocados por la inmigración ilegal", pero "El estado no puede llevar a cabo políticas que socaven la ley federal".
El fiscal general de Oklahoma, Gentner Drummond, dijo que el fallo era decepcionante, y alegó que la ley es necesaria.