- AUSTIN, Texas
El gobernador Greg Abbott movió al estado más a la derecha en los dos últimos años que en todo el período de su mandato. Y aunque ha enfrentado controversia tras controversia a lo largo del camino, ha hecho algunas apuestas arriesgadas –por ejemplo, se ha asegurado que la planta eléctrica no falle nuevamente.
Y aunque O’Rourke acusó a Abbott de ser demasiado extremista con el aborto y las armas –los sondeos demostraron que los votantes estaban de acuerdo con eso– Abbott siguió intratable, rehusándose a considerar cualquier medida para restringir el acceso a las armas de fuego o reconsiderar la prohibición de la interrupción del embarazo en el estado.
Por el contrario, mantuvo su mensaje enfocado en la seguridad fronteriza y la economía. Incluso, los asesores de O’Rourke admitieron posteriormente que Abbott hizo un buen trabajo manteniendo el enfoque en temas que lo favorecían expresó The Texas Tribune en su plataforma digital
Sin embargo, la campaña del gobernador no cumplió con las expectativas en todos los frentes, las encuestas de salida mostraron que no logró su objetivo de ganar la mayoría de votantes hispanos en todo el estado.
Promesas de campaña y la próxima sesión
También enfatizó el darles a los padres de familia más dinero para la educación de sus hijos. Lo más notable es que declaró que debería seguir el financiamiento estatal para los estudiantes, independientemente del tipo de escuela a la que asistan, una declaración que representó un beneficio para los simpatizantes de los vales escolares.
Abbott está decidido a seguir dándole prioridad a la seguridad fronteriza en la siguiente sesión. Eso podría significar mantener o expandir el Operativo Lone Star, el programa de 4 billones de dólares que en su punto álgido desplegó casi 10 mil soldados de la Guardia Nacional de Texas a la frontera u otras partes del estado para frenar el cruce de migrantes.
El gobernador también inició un muro fronterizo financiado por el estado y ocupó los titulares al enviar a miles de migrantes en autobús a ciudades gobernadas por demócratas.
Aunque ha tomado una acción sin precedentes en la frontera, aún no ha logrado la aceptación de algunos de sus compañeros republicanos quienes aseguran que no está haciendo lo suficiente.
Eso quedó de manifiesto la semana pasada, ya que Abbott reiteró la acción que tomó durante el verano para tratar la situación como una “invasión” de acuerdo a la Constitución de Estados Unidos y ordenar a las autoridades estatales que vuelvan a aprehender a los migrantes en la frontera.
El mandatario estatal también enfrentará una presión dentro del partido sobre las prioridades legislativas del Partido Republicano en Texas, que incluyen cierto terreno común aunque también algunas causas que Abbott ha estado reacio a aceptar.
Entre ellas está la prohibición de “la modificación de género en los niños”, o los tratamientos médicos para los niños transgénero. Esa presión se ha intensificado contra Abbott desde que Florida aprobó recientemente esa prohibición.
TEMAS NO RESUELTOSLa reelección de Abbott estuvo animada por una serie de calamidades que Texas ha soportado desde principios del 2020. Justo debido a que él gano no significa que las fallas en esos eventos hayan terminado.
En Uvalde, la duda persiste acerca de una pésima respuesta de las autoridades al tiroteo ocurrido en mayo, en donde la Policía tomó más de una hora para abatir al responsable.
Durante la campaña, Abbott se apoyó mayormente en el hecho de que los comités especiales estaban diseñando recomendaciones legislativas relacionadas con el tiroteo –recomendaciones que se espera sean dadas a conocer en las próximas semanas.
Otra duda es el destino que tendrá Steve McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, cuya agencia está entre las que fallaron en su respuesta al ataque.
El senador estatal demócrata que representa a Uvalde, Roland Gutiérrez, en repetidas ocasiones ha dicho que Abbott debería pedirle a McCraw que renuncie.
Abbott trató infructuosamente de derrotar a Gutiérrez en la elección del 8 de noviembre, apoyando a su contrincante y utilizando sus propios fondos de campaña para comprar anuncios televisivos para atacar a Gutiérrez. Sin embargo, Gutiérrez ganó por un cómodo margen en su distrito, mayormente demócrata, y se ha comprometido a aumentar la presión sobre Abbott en relación con McCraw.
En cuanto a la planta eléctrica, el gobernador ha declarado que todo lo que se necesitaba hacer para arreglarla se hizo en la sesión legislativa regular del 2021. Sin embargo, un líder estatal, el subgobernador Dan Patrick, consistentemente ha mostrado su desacuerdo, incluyendo durante su campaña de reelección.
En los anuncios de televisión de la campaña, Patrick presumió la exitosa presión que logró para que renunciaran los designados de Abbot, quienes supervisaron la planta. Uno de los últimos anuncios publicitarios en televisión de Patrick prometió que seguiría “fortaleciendo nuestra planta eléctrica”.
Y sobre el aborto –que al parecer es el tema principal de los demócratas en la elección– algunos republicanos de la Legislatura expresaron su apoyo agregando la violación y el incesto como excepciones a la casi total prohibición del estado.