- AUSTIN, Texas
Veinte estados con fiscales generales republicanos demandaron el martes al gobierno del presidente Joe Biden por un importante cambio en la política de inmigración que devolvería a más inmigrantes pero permitiría la entrada legal de 360,000 personas al año procedentes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
La demanda encabezada por Texas pretende suspender la emisión de permisos condicionales humanitarios a gran escala para esos cuatro países, que podrían totalizar 360,000 al año. La querella ha sido asignada al juez federal de distrito Drew Tipton en Corpus Christi, quien fue designado por el expresidente Donald Trump y quien ha fallado en contra del gobierno de Biden sobre a quién dar prioridad para deportación.
Las autoridades estadounidenses han registrado un descenso del 97% en los cruces fronterizos ilegales por parte de migrantes procedentes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela desde que México empezó a aceptar a los ciudadanos de esas naciones que sean expulsados de Estados Unidos en virtud de una orden implementada en la pandemia de coronavirus, informó el miércoles el gobierno del presidente Joe Biden.
El anuncio se produce un día después de que Texas y otros 19 estados gobernados por republicanos interpusieron una demanda para detener la concesión generalizada del permiso condicional humanitario a ciudadanos de esos cuatro países que la soliciten por internet, vuelen a Estados Unidos y encuentren un patrocinador económico.
El gobierno estadounidense señaló el 5 de enero que admitiría hasta 30,000 personas al mes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela para que se queden en el país durante dos años con permiso para trabajar.