Washington
Los reguladores estadounidenses investigan reportes de que el freno automático de emergencia se activa sin razón alguna en dos modelos de vehículos Honda.
La pesquisa de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA por sus siglas en inglés) abarca más de 250.000 autos de los modelos Insight y Passport de los años entre 2019 y 2022.
Es una de varias averiguaciones de la agencia sobre sistemas de frenos automáticos, una tecnología que ha sido publicitada como capaz de evitar choques y salvar vidas.
En documentos colocados el lunes en su website, la agencia dice que ha recibido 46 quejas de propietarios según los cuales los frenos se activan súbitamente sin que haya objeto alguno frente al vehículo. En las quejas se reportan tres choques y dos personas heridas.
La agencia indicó que está investigando para determinar la magnitud y severidad del potencial problema, que podría aumentar el riesgo de choque.
En un comunicado, Honda detalló que está cooperando con la pesquisa y que ha emprendido una revisión interna. Agregó que es el primer nivel de averiguación de la agencia y abarca "un número limitado de reportes de consumidores de activación inadvertida del sistema automático del freno de emergencia".
Hace poco más de dos años la NHTSA inició una investigación sobre quejas de que más de 1,7 millones de vehículos Honda frenan sin tener ningún obstáculo enfrente. La indagación abarcó dos de los modelos Honda más populares: el CR-V y el Accord.
La NHTSA también abrió una pesquisa en 2022 sobre por lo menos 750 quejas de que los modelos 3 e Y de Tesla frenaban sin razón alguna.
Y en mayo del año pasado, la agencia empezó a investigar quejas similares sobre camiones Freightliner.
En mayo del año pasado, la agencia anunció planes de requerir que todos los vehículos de pasajeros y camiones ligeros nuevos tengan sistemas de frenos automáticos en un lapso de tres años. La regulación propuesta fijaría estándares para que los sistemas sean más eficaces a velocidades más altas y para evadir a peatones, especialmente de noche.
La regulación propuesta, por ejemplo, requerirá que los sistemas permitan que un vehículo evada totalmente a otro vehículo que esté yendo a hasta 80 kilómetros por hora (50 millas por hora) si el conductor no ha reaccionado. Si el conductor frena pero no lo suficiente para evitar una colisión, el sistema tendrá que evadir a otro vehículo que esté yendo a 100 km/h (62 mph).