WASHINGTON
En un giro político que podría tener grandes consecuencias, decenas de miles de votantes suburbanos que alentaron las conquistas demócratas en los últimos años se están pasando al Partido Republicano.
Más de un millón de votantes de 43 estados se pasaron al Partido Republicano en el último año, según un análisis de los registros de la afiliación partidaria hecho por la Associated Press.
Estas cifras, que no habían trascendido hasta ahora, reflejan un fenómeno que se registra en casi todo el país desde que Joe Biden reemplazó a Donald Trump en la presidencia.
Pero es más pronunciado, y peligroso para los demócratas, en los suburbios, donde votantes con estudios universitarios que le dieron la espalda al Partido Republicano en la era de Trump parecen estar volviendo.
En el último año, mucha más gente se ha pasado el Partido Republicano desde Denver hasta Atlanta, Pittsburgh y Cleveland. Los republicanos también están ganando terreno en ciudades medianas como Harrisburg (Pensilvania), Raleigh (Carolina del Norte), Augusta (Georgia) y Des Moines (Iowa).
Ben Smith, quien vive en el suburbio de Larimer County, al norte de Denver, dijo que, con cierta reticencia, se pasó al Partido Republicano esta año, molesto con la insistencia de los demócratas en obligar a vacunarse contra el COVID-19, su inoperancia para contener la delincuencia y su énfasis en la justicia racial.
“Es más bien un rechazo a la izquierda que un giro a la derecha”, manifestó Smith, un consejero profesional de 37 años que empezó a decepcionarse con los demócratas hace seis años, registrándose como un libertario.
La AP examinó casi 1,7 millones de votantes que habrían cambiado su afiliación partidaria en los 42 estados donde existen esos registros para el último año, de acuerdo con L2, una firma que recopila información electoral estadística.