NUEVA YORK.- El director general de Boeing, David Calhoun, dejará su cargo en el asediado fabricante de aviones a finales del año en medio de una reestructuración administrativa más amplia, tras una serie de percances en una de las empresas más destacadas de Estados Unidos.
Stan Deal, presidente y director general de la unidad de aviones comerciales de Boeing, se retirará inmediatamente y Stephanie Pope, directora de operaciones de la compañía, dirigirá la división.
La empresa informó que el presidente de la junta, Lawrence Kellner, no planea buscar su reelección en mayo.
Boeing está bajo intensa presión desde principios de enero, cuando el panel de la puerta de un flamante 737 Max de Alaska Airlines se zafó en pleno vuelo. Los investigadores dicen que faltaban pernos que ayudan a mantener el panel en su lugar después de los trabajos de reparación en la fábrica de Boeing.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) ha intensificado su escrutinio sobre la compañía, incluido el límite de producción de los 737. Una auditoría de la FAA en la fábrica de los 737 cerca de Seattle le dio a la compañía calificaciones reprobatorias en casi tres docenas de aspectos de la producción.
Los ejecutivos de las aerolíneas han expresado su frustración con la compañía, e incluso incidentes aparentemente menores que involucran aviones Boeing han atraído especial atención.
El incidente del 5 de enero ha elevado el escrutinio sobre Boeing a su nivel más alto desde que dos de sus aviones 737 Max se estrellaron en 2018 en Indonesia y en 2019 en Etiopía. En total, los accidentes mataron a 346 personas.
En una nota enviada el lunes a los empleados, Calhoun, de 67 años, calificó el incidente como "un momento decisivo para Boeing" que requiere "un compromiso total con la seguridad y la calidad en todos los niveles de nuestra empresa".
"Los ojos del mundo están puestos en nosotros y sé que saldremos de este momento como una mejor compañía, aprovechando todos los aprendizajes que acumulamos mientras trabajamos juntos para reconstruir Boeing durante los últimos años", dijo.
Calhoun indicó que la decisión de irse fue suya.
La compañía dijo que su directorio eligió al exdirector general de Qualcomm, Steven Mollenkopf, para convertirse en el nuevo presidente y liderar la búsqueda del reemplazo de Calhoun.
Calhoun era director de Boeing cuando se convirtió en CEO en enero de 2020, reemplazando a Dennis Muilenburg, quien fue despedido luego que los Max se estrellaron.
Boeing también está bajo intensa presión por parte de los directores generales de varias aerolíneas, quienes han expresado abiertamente su frustración por los problemas de fabricación de la compañía, que han ralentizado las entregas de los aviones con los que contaban las aerolíneas.
Southwest Airlines dijo recientemente que estaba reevaluando sus expectativas financieras para este año debido a retrasos relacionados en la entrega de aviones.