Incomoda cambio climático

Vivek Ramaswamy dijo que era "un engaño" y una "jarra de agua fría para nuestra economía"

NUEVA YORK, NY

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A los ocho precandidatos presidenciales republicanos en el escenario del debate se les pidió que levantaran la mano si creían que el comportamiento humano está provocando el cambio climático.

Ni una sola mano se levantó.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ignoró la pregunta y atacó a los "conglomerados de medios de comunicación". Haciendo eco de las palabras del expresidente Donald Trump, Vivek Ramaswamy dijo que el cambio climático era "un engaño" y una "jarra de agua fría para nuestra economía". El senador Tim Scott, republicano de Carolina del Sur, insistió en que hay amenazas ambientales más graves que provienen de China, India y África.

Sólo una republicana, la ex embajadora estadounidense ante la ONU Nikki Haley, dijo durante el debate del miércoles por la noche en Milwaukee que el cambio climático "es real".

Al día siguiente, líderes frustrados del pequeño pero creciente movimiento de activistas ambientales republicanos dijeron que el partido debe hacer las cosas mejor. De hecho, algunos conservadores jóvenes confrontaron a Ramaswamy en una reunión tras el debate y le dijeron que su respuesta fue especialmente contraproducente.

"Estamos llegando a un punto en el que los republicanos están perdiendo elecciones que podrían ganar porque están alejando a personas a las que les importa el cambio climático", declaró el jueves Christopher Barnard, el presidente republicano de la American Conservation Coalition, el mayor grupo ambientalista conservador de Estados Unidos.

Ahora que la contienda presidencial de 2024 ha iniciado en serio, el Partido Republicano pasa apuros para reconciliar la creciente preocupación por el cambio climático —en especial entre los jóvenes— con su base de edad más avanzada, que en gran medida rechaza el fenómeno del calentamiento del planeta, considerándolo una teoría conspiracionista liberal. La gran mayoría de los científicos están de acuerdo en que los gases de efecto invernadero generados por la quema de combustibles fósiles están provocando un incremento en las temperaturas globales, trastocando los patrones climáticos y poniendo en peligro a las especies de animales.

Algunos líderes republicanos han reconocido que no pueden ignorar por completo el cambio climático. El presidente Kevin McCarthy, de California, ha exhortado a plantar 1 billón de árboles para ayudar a proteger el medio ambiente. Pero las soluciones promovidas desde hace tiempo por los demócratas y por activistas ambientales —la acción gubernamental para obligar a reducir las emisiones— siguen teniendo nulas posiblidades de ser aceptadas por los candidatos presidenciales del Partido Republicano.

"La agenda del cambio climático es un engaño", declaró Ramaswamy durante el debate, repitiendo la frase para darle mayor énfasis, incluso mientras algunos jóvenes en la audiencia lo abucheaban. "La realidad es que más personas están muriendo a consecuencia de las políticas para enfrentar el cambio climático de las que realmente fallecen debido a él".

Ninguno de los rivales de Ramaswamy, ansiosos de atacarlo en otros temas durante el debate de dos horas, lo desafiaron directamente en lo que respecta al clima, incluso después de que los moderadores pusieron de relieve nuevas evidencias de que el cambio climático está provocando grandes problemas.

El exvicepresidente Mike Pence, que guardó silencio con respecto al calentamiento del planeta durante el debate, insinuó el jueves que en gran medida se trata de una cuestión de los mensajes que envía el Partido Republicano.

"Miren, el clima está cambiando, pero creo que la cuestión es qué hacemos con respecto a eso", le dijo Pence a The Associated Press, condenando las políticas respaldadas por los demócratas, tales como el así llamado Nuevo Pacto Verde. "Todo consiste en comunicar una visión distinta".

Mientras tanto, las condiciones en el país y el mundo están creando una nueva urgencia para que el Partido Republicano se tome en serio el cambio climático.

Intensas lluvias cayeron en Cleveland durante el debate, y hubo inundaciones en Detroit durante la noche. Los incendios forestales en Canadá han derivado en la presencia de aire contaminado en gran parte de Estados Unidos, mientras que un catastrófico incendio forestal en Hawai fue el más letal en más de un siglo. El sur de California se vio azotado por una tormenta tropical por primera vez en décadas.

Pero el mayor efecto climático ha sido el calor.

En julio se registraron temperaturas diarias y mensuales a nivel global más cálidas que equipos modernos hayan registrado jamás. Algunos científicos dijeron que fue el mes más cálido en unos 120.000 años, basándose en los anillos de los árboles y otros indicadores. Los océanos del mundo han establecido récords de calor cada mes desde la primavera, tanto en la superficie como a niveles más profundos. En Florida la temperatura del mar alcanzó al menos 37 grados Celsius (100 grados Fahrenheit) y un blanqueamiento sin precedentes en los corales.

El debate presidencial "puso de relieve el hecho de que uno de los dos partidos (el Partido Republicano) no sólo se niega a actuar ante la crisis del clima, sino que incluso se niega a reconocer que existe", dijo en un correo electrónico Michael Mann, climatólogo de la Universidad de Pensilvania. "Es una posición descalificadora en el reto decisivo de nuestra época".

"El partido perderá una enorme porción de votantes, especialmente mujeres y jóvenes, si adopta esta posición", agregó.

La mayoría de los habitantes de Estados Unidos (el 62%) dicen que el gobierno federal está haciendo demasiado poco para reducir el cambio climático, de acuerdo con un sondeo efectuado en septiembre de 2022 por The Associated Press y el Centro NORC para la Investigación de Asuntos Públicos. Incluso mientras los adultos estadounidenses piensan que el gobierno no está haciendo lo suficiente, existe una división evidente entre los republicanos.

La mitad de los republicanos menores de 45 años dicen que el gobierno no está atendiendo suficientemente el calentamiento del planeta, en comparación con sólo el 32% de los republicanos de mayor edad.

Los republicanos jóvenes dicen también que se sienten preocupados cuando hablan sobre el cambio climático a una tasa más elevada que los republicanos de edad más avanzada. 

TRIUNFAN LOS AMBIENTALISTAS

Una encuesta AP-NORC realizada en abril halló que el 17% de los republicanos jóvenes dijeron que "nervioso" describe cómo se sienten cuando hablan sobre el cambio climático, en comparación con el 7% entre los republicanos de mayor edad.

Entre los estadounidenses en general, es doblemente probable que los que tienen menos de 45 años digan sentirse preocupados cuando hablan sobre el cambio climático que los que tienen 45 o más (30% frente al 15%).

Barnard, de la American Conservation Coalition, dijo que era un triunfo para los ambientalistas conservadores el hecho de que al menos se haya planteado la pregunta sobre el clima en el debate. Pero considera que su partido debe hacer las cosas mejor, y les ofreció una recomendación a los precandidatos presidenciales republicanos.


"No es necesario que sean el mayor paladín de defensa del clima", señaló. "Si tan sólo dicen: ´el cambio climático es real, y vamos a tener algún tipo de solución´, eso es suficiente para la mayoría de los electores".