Austin, Texas
Comparados con el diablo, los ángeles tienen más credibilidad en Estados Unidos.
Los ángeles incluso tienen más credibilidad que, bueno, el infierno. Más que la astrología, la reencarnación y la creencia de que las cosas materiales tienen energías espirituales.
De hecho, aproximadamente 7 de cada 10 adultos estadounidenses creen en los ángeles, según un nuevo sondeo realizado por The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research.
"Las personas anhelan algo superior a ellos, más allá de su propia comprensión", dijo Jack Grogger, capellán del equipo de béisbol Angelinos de Los Ángeles y capitán de bomberos en el sur de California, que desde hace mucho tiempo ha ayudado a muchas personas en sus momentos difíciles.
Esa búsqueda de algo superior, dijo, puede tomar muchas formas, desde observar una religión hasta crear un propósito propio y, por supuesto, creer en los ángeles.
"Para muchas personas, es mucho más seguro adorar a los ángeles", dijo Grogger, quien también es pastor en una iglesia no confesional en Orange, California, y capellán de los Anaheim Ducks de la liga profesional de hockey sobre hielo NHL.
Las personas acuden a los ángeles para recibir consuelo, comentó. Resultan familiares y con frecuencia aparecen en la cultura pop y en la Biblia. En comparación, para adorar a Jesús hay que involucrarse mucho más. Cuando Grogger predica sobre ángeles es dentro del contexto de que son parte del reino de Dios.
La cantidad de estadounidenses que creen en los ángeles (69%) es similar a quienes creen en el cielo y el poder de la oración, pero es superada por la creencia en Dios o un poder superior (79%). Son menos los adultos estadounidenses que creen en Satanás (56%), la astrología (34%), la reencarnación (34%) y en que las cosas materiales tienen energías espirituales, como las plantas, los ríos o los cristales (42%).
A Susan Garrett, experta en ángeles y profesora del Nuevo Testamento en el Seminario Teológico Presbiteriano en Louisville, Kentucky, le parece lógica la amplia aceptación de los ángeles demostrada en el sondeo de AP-NORC. El resultado coincide con sondeos previos, comentó, y agregó que Estados Unidos sigue siendo un país de mucha fe, incluso en un momento en que más estadounidenses rechazan la religión organizada.
Pero si el diablo está en los detalles, también lo está la comprensión que las personas tienen de los ángeles.
"Son muy maleables", dijo Garrett sobre los ángeles. "Puedes tener una de una serie de cosmovisiones muy distintas en cuanto a tu comprensión de cómo está organizado el cosmos, si son seres espirituales, si hay vida después de la muerte, si existe un Dios... y aun así encontrar un lugar para los ángeles en esa cosmovisión".
La conversación sobre los ángeles, señaló Garrett, con frecuencia también es sobre algo más, como las formas en que Dios interactúa con el mundo y otras ideas difíciles de expresar.
La gran cantidad de adultos estadounidenses que cree en los ángeles incluye 84% de quienes están afiliados a una religión — 94% son protestantes evangélicos, 81% protestantes tradicionales y 82% católicos — y 33% no tienen religión. Y entre los creyentes en ángeles sin religión, 2% son ateos, 25% agnósticos y 50% se identifica como "nada en particular".
La amplia aceptación es lo que fascina al brujo y escritor Devin Hunter basado en San Francisco: Los ángeles aparecen de forma independiente en diferentes religiones y tradiciones, lo que los convierte en parte del tejido que une a la humanidad.
"Todos llegamos a la misma conclusión", dijo Hunter, quien durante 16 años fue médium profesional y de niño comenzó a comunicarse con lo que él creía eran ángeles.
Hunter calcula que aproximadamente la mitad de quienes practican la brujería moderna creen en los ángeles y quienes no, con frecuencia se debe a un trauma religioso que experimentaron cuando crecían.
"Los ángeles se convierten en algo muy importante" para quienes han sido practicantes mucho tiempo y el ocultismo se ha convertido en su principal foco, dijo Hunter, un ocultista amante de los ángeles. "De ninguna manera podemos escapar de ellos".
Jennifer Goodwin, de Oviedo, Florida, está entre los aproximadamente siete de cada 10 adultos estadounidenses que creen en los ángeles. No está segura si Dios existe y rechaza la dicotomía del cielo y el infierno, pero las muertes recientes de sus padres consolidaron su opinión sobre estos seres celestiales.
Goodwin cree que sus padres todavía cuidan de la familia, no de forma física ni como una aparición sobrenatural, sino que se manifiestan en esos momentos en que siente un consuelo general.
"Creo que nos rodean, pero en una forma que no podemos comprender", dijo Goodwin. "No sé de qué otra forma llamarlo, excepto un ángel".
Los ángeles tienen un significado diferente para diferentes personas, y la idea de que los seres queridos se convierten en ángeles celestiales no es una creencia inusual ni universal.
Durante su lectura de las Escrituras como protestante evangélico, Grogger dijo que cree que los ángeles son algo totalmente diferente: nunca han sido humanos y están en otro nivel de la jerarquía celestial. "Estamos más arriba que los ángeles", dijo. "No nos convertimos en ángeles".
Aunque los ángeles sí interactúan con humanos, dijo Grogger, pero "no estamos 100% seguros del cómo". Adoran a Dios que creó esta legión angelical de tamaño desconocido, comentó. Los evangélicos con frecuencia atribuyen las fuerzas demoníacas en el mundo a los ángeles que cayeron del cielo cuando el diablo se reveló, agregó.
Las ideas occidentales sobre los ángeles pueden encontrarse en la Biblia y en la cosmovisión de sus autores monoteístas, dijo Garrett. Aquellas creencias han cambiado y se han desarrollado durante milenios con la influencia de culturas, teólogos e incluso las antiguas creencias politeístas que surgieron antes de la Biblia hebrea y el Nuevo Testamento, comentó.
"Son las especies de líneas de continuidad de la Biblia que puedes rastrear hasta el movimiento de la Nueva Era", dijo Garrett, autora de "No Ordinary Angel: Celestial Spirits and Christian Claims about Jesus" ("Ningún ángel ordinario: espíritus celestiales y afirmaciones cristianas sobre Jesús").
Los ángeles en la Biblia cumplen las órdenes de Dios y la violencia angelical es sólo una parte de su descripción laboral, según Esther Hamori, autora del libro no publicado "God´s Monsters: Vengeful Spirits, Deadly Angels, Hybrid Creatures, and Divine Hitmen of the Bible" ("Los monstruos de Dios: Espíritus vengativos, ángeles mortales, criaturas híbridas y sicarios divinos de la Biblia").
"Es tan probable que los ángeles de la Biblia asesinen a individuos y maten poblaciones enteras a que ofrezcan ayuda, protejan y cumplan", dijo Hamori.
Ella no cree en estos ángeles, pero los estudia como profesora de Biblia hebrea en el Seminario Teológico Unión en Nueva York, en donde enseña la popular clase de "Cielo de monstruos".
"Sólo son los soldados obedientes de Dios y cumplen la tarea encomendada, y a veces esa tarea es para beneficio de los seres humanos y otras veces no", agregó.
La percepción de que los ángeles actúan de manera angelical y se ven como las estatuillas aladas idílicas sobre el árbol de Navidad, puede atribuirse a una creencia centenaria de que a las personas se les asigna un ángel bueno y uno malo, o que tienen un espíritu bueno y uno malo para guiarlas, señaló Garrett.
Esta idea se presenta en los hombros de personajes de caricaturas y probablemente a eso hacía referencia Abraham Lincoln en su famoso llamado a la unidad cuando mencionó a "los mejores ángeles de nuestra naturaleza" en su primer discurso inaugural, comentó.
"También está ligado a las ideas sobre los ángeles guardianes que, de nuevo, son visiones muy antiguas que se fueron desarrollando durante los siglos", dijo Garrett.
Para Sheila Avery de Chicago, los ángeles son protectores, capaces de evitar daño a alguien. Avery, quien pertenece a una iglesia aconfesional, les da crédito por esos momentos en que los planes de alguien se vienen abajo, pero al final se salvan de estar en medio de un desastre inesperado.
"Miran el noticiero y una terrible tragedia sucedió en ese lugar en particular", dijo Avery como insinuación de que fue un "ángel el que probablemente los cuidaba".