WASHINGTON, DC
Las autoridades de salud de Estados Unidos advirtieron a proveedores de servicios médicos y al público en general sobre lesiones — incluido al menos un fallecimiento — en bebés prematuros que recibieron productos probióticos en el hospital.
Los productos, los cuales suplementan la alimentación regular y contienen organismos vivos como bacterias o levadura, pueden conducir a infecciones o enfermedades invasivas y potencialmente letales, indicó la agencia el jueves.
Un fallecimiento este año y más de una veintena de reportes de lesiones desde 2018 podrían estar vinculados con los suplementos, señalaron funcionarios de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus iniciales en inglés) en un comunicado. La agencia también investiga otros reportes de lesiones y decesos.
Ningún producto probiótico ha recibido aprobación como medicamento o tratamiento para bebés, añadió la FDA.
La agencia emitió cartas de advertencia a dos compañías acusadas de promocionar ilegalmente sus productos probióticos. Una de las compañías fue Abbott Laboratories, en torno a la cual giró un retiro de productos y escasez nacional de fórmula láctea el año pasado. Después de recibir la misiva enviada el martes, la empresa con sede en Illinois accedió a suspender la venta de su producto Similac Probiotic Tri-Blend y trabajar en conjunto con la FDA para tomar acciones correctivas adicionales, explicó la agencia.
Funcionarios de Abbott señalaron en un comunicado que los productos se utilizaron en menos de 200 hospitales y no están relacionados con las fórmulas lácteas en polvo Similac que se venden en las tiendas.
Agentes de la FDA dijeron en septiembre pasado que Evivo con aceite MCT, un probiótico fabricado por Infinant Health, con sede en Norwalk, Connecticut, causó la muerte de un bebé prematuro este año. La secuenciación genética confirmó que la bacteria que provocó sepsis fue el mismo germen que se encontró en el producto probiótico.
Funcionarios de Infinant Health indicaron en un comunicado que la compañía retiró y descontinuó voluntariamente el producto. Su venta era exclusiva para uso en hospitales y no está relacionado con los productos disponibles en tiendas minoristas.
Los suplementos probióticos pueden usarse para evitar la enterocolitis necrosante, una peligrosa infección que afecta a bebés prematuros y la cual inflama y mata el tejido intestinal. El padecimiento afecta hasta a 9.000 bebés al año, con una tasa de mortalidad cercana al 50%.