- MISSION, Texas
Una mujer y su hijo fueron acusados por inducir a una menor de 16 años a prostituirse, por lo que el fiscal federal Alamdar S. Hamdani les estableció la sentencia.
Rita Martínez, de 65 años, y su coacusado, Genaro Fuentes, de 41, obligaron a la adolescente a a participar en trabajo sexual comercial en una cantina que ellos poseían y operaban en Mission conocida como Pérez Lounge, Rita’s Lounge y Rita’s Sports Bar.
Las autoridades agregaron que Martínez se quedó con el dinero y lo aplicó al costo de la tarifa de transporte de la niña desde México.Los hechos ocurrieron desde la primavera de 2005 hasta el otoño de 2006, la menor mexicana vivía en la casa de Martínez y trabajaba en su bar.
“Usando su cantina como fachada, Rita Martínez obligó a la joven migrante a tener actos sexuales con los clientes masculinos de Rita”, dijo el fiscal. “Nadie debería tener que soportar ese tipo de trato.
A veces lleva tiempo, pero no nos rendiremos. Nos aseguraremos de que personas como Martínez respondan por violar las leyes de los Estados Unidos al aprovecharse de los miembros débiles y vulnerables de nuestra sociedad”.
Martínez fue arrestada por 11 cargos de tráfico sexual de menores. El jueves, Martínez llegó a un acuerdo de culpabilidad, aceptando declararse culpable de un cargo de tráfico sexual y desestimo los 10 cargos restantes, según muestran los registros federales. Los cargos desestimados incluía un total de 10 víctimas.
La acusación también dijo que Martínez insultó y humilló a las jovencitas agrediéndolas físicamente o arrastrándolas por el cabello si la desobedecían. Si las mujeres tuvieran un hijo, Martínez supuestamente restringiría su acceso al niño, exigiendo que trabajaran más para poder vestirlo y alimentarlo.
El hijo de Martínez, Genaro Fuentes, de 41 años, se declaró culpable el 26 de enero, admitiendo su papel trabajando en el bar y facilitando la prostitución. La acusación contra Fuentes incluye agredir sexualmente a mujeres recién llegadas, diciéndoles que tenía derecho a hacerlo.
Martínez enfrenta una condena de 10 años y hasta cadena perpetua. Fuentes podría recibir una sentencia máxima de 20 años.