Tras el éxito de las operaciones Blue Lotus y Four Horsemen, que detuvieron casi 10,000 libras de fentanilo durante sus dos meses de duración y condujeron a 284 arrestos en esos dos meses, ayer el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció la siguiente fase de su campaña de refuerzo para identificar y prevenir el ingreso de fentanilo a los Estados Unidos.
Las próximas dos operaciones, "Artemis" y "Rolling Wave", consistirán en equipos de salto interinstitucionales multidisciplinarios en ubicaciones estratégicas con un enfoque mejorado en interrumpir la cadena de suministro utilizada en el desarrollo y movimiento de fentanilo.
La Operación Artemis, dirigida por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), aprovechará la información de inteligencia e investigación derivada de la Operación Blue Lotus para atacar la cadena de suministro de fentanilo e interceptar los artículos necesarios para su producción. Esta labor contará con el apoyo de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI).
Al mismo tiempo, la Operación Rolling Wave incrementará las inspecciones de entrada en los puestos de control de la frontera suroeste, cubriendo todos los sectores y aprovechando el análisis predictivo y el intercambio de inteligencia.
HSI seguirá aumentando los recursos en los puertos de entrada, donde el 90 por ciento del fentanilo se trafica principalmente en automóviles y camiones, al tiempo que aumenta la coordinación de las operaciones para abordar la cadena de suministro de fentanilo en el marco de Blue Lotus 2.0. CBP llevará a cabo una operación paralela de inteligencia y análisis, la Operación Argus, para proporcionar un análisis centrado en el comercio en apoyo de Blue Lotus 2.0 y Artemis.
"El trabajo de inteligencia e investigación que están realizando las agencias del DHS y nuestros socios federales para interrumpir la cadena de suministro de fentanilo no tiene precedentes", dijo el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro N. Mayorkas.