Diego, un niño de siete años que sufrió serias quemaduras en su rostro mientras jugaba con una botella con gasolina en Valle Hermoso la noche del sábado, ayer fue trasladado por la ambulancia del Gobierno municipal al Hospital Infantil de Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Junto con su primito Iker, el niño Diego metió un papel encendido a una botella que contenía combustible, la cual explotó al momento y le quemó el rostro a él y a su primo, pero en menor grado.
Ambos niños fueron llevados al Hospital General, donde se les brindó atención médica desde el mismo sábado, y hasta ayer fue cuando se pidió que fuera trasladado al Hospital Infantil de Victoria.
El Gobierno de la ciudad autorizó que la ambulancia acudiera y corrió con todos los gastos en apoyo a la familia del menor, el cual sería recibido en la capital del estado.
Los padres de Diego indicaron que todo sucedió en un momento de descuido e hicieron un llamado a las familias de la ciudad para que tengan mucha precaución con sus hijos.