Buscan amparo vs. los libros de texto

La resolución judicial la promovieron los integrantes de la Unión de Padres de Familia del sur de Tamaulipas

Tampico, Tam.- Los nuevos libros de texto no deberán salir de las bodegas en Tamaulipas, y quienes los distribuyan podrían alcanzar penas de hasta nueve años de cárcel con el amparo que está promoviendo la Unión de Padres de Familia en el sur de Tamaulipas.

CONSIDERAN DAÑO A NIÑEZ

Y es que buscan un amparo para que en este estado no sean entregados ni utilizados los nuevos libros de texto, por considerar que causan un grave daño a la niñez tamaulipeca.

David Hernández Muñiz, representante de la Unión de Padres de Familia, dijo que una vez que se dé  el resolutivo del amparo, quien no acate la disposición se hará acreedor a multa y cárcel, pues se trata de una orden de un juez federal.

Expuso que la UPF son apoyados por la Coparmex, diputados locales y federales, por lo que se  interpuso el recurso de amparo el pasado 11 de agosto en el Juzgado Décimo de Distrito, radicado en esta ciudad.  

  • "Los libros nuevos que propone el Gobierno federal no proceden, porque debieron de haber cambiado planes y programas. ¿Cómo es posible que la Secretaría de Educación Pública, que se supone son seres pensantes, saquen boletín diciendo que vuelve la Nueva Escuela Mexicana, derogada en 2021 y, además, avalen los nuevos libros de texto?"

Por ello es que, a través de ese amparo la UPF pide se frene la distribución de los libros de texto y dejó claro que no es un amparo sólo para el sur de Tamaulipas, sino para todo el estado.

"Está en estudio, no dudamos que en Tamaulipas sea un hecho histórico, 

inédito, porque una Asociación Civil detiene a una autoridad que viene, incluso, a nivel federal por violaciones a la ley flagrantes a la Constitución y, a la vez, secundaria, por violaciones a la Ley de Educación", recalcó.  

Señaló que no existe plan de estudios que avale la impresión de estos libros ni existe capacitación a docentes para efectos de cómo van a impartir las clases a los niños.

Quienes no acaten la disposición del juez, en caso de que aún con este amparo los distribuyan, se podrían hacer acreedores a sanciones económicas y hasta tres a nueve años de cárcel. 

David Hernández explicó sobre la preocupación sobre los libros de texto que ya los han analizado y así como leído completamente, encontrando muchos detalles, como que las materias no tienen libros específicos y los contenidos  de matemáticas son insuficientes, sumado a  muchos otros aspectos, donde dejó claro que México no es Holanda para tener una sociedad progresista, ni Cuba o Venenzuela para adoctrinar a la niñez, resaltando que México tiene, en su mayoría, una familia de valores y religiosa.

En ese sentido, abundó que son ocho estados los que han dicho que no se repartirán los libros hasta que no se resuelva el juicio de amparo y la controversia constitucional presentada por Chihuahua, esperando que el tribunal más alto de justicia les dé la razón a sus argumentos y preocupación, frenando este cambio en la enseñanza con esos libros de texto.