Para garantizar la seguridad de los visitantes de Playa Miramar, la Guardia Estatal ha intensificado sus patrullajes en las zonas de mayor riesgo, exhortando a los bañistas a respetar la bandera negra y abstenerse de ingresar al mar hasta nuevo aviso.
La vigilancia se concentra en las torres número uno, dos, siete y diecisiete, donde los agentes han detectado a personas dentro del agua. A estos turistas se les ha solicitado retirarse del mar para proteger su integridad física.
La bandera negra, que se ha izado en la playa, indica que está cerrada al público debido a las condiciones climatológicas adversas, y se mantendrá así hasta que sea seguro disfrutar de este destino turístico nuevamente.