Incendios de maleza que se extendieron por cientos de hectáreas la noche del jueves y madrugada del viernes, causaron afectaciones a la salud de residentes de Nuevo Progreso.
La quemazón de arbustos y follaje en la periferia de la villa y de la autopista Matamoros-Reynosa se prolongó por horas, generando densa bruma de tóxicos que penetraron en viviendas.
Igualmente, afectaron la visibilidad en carreteras federales próximas, pero por fortuna no se registraron víctimas de intoxicación.