Residentes de puntos donde aún no disminuyen los incidentes de violencia, tales como brecha 109 entre 22 y 10 y el ejido Palo Blanco, tienen entre sus pasatiempos la recolección de casquillos de diversos calibres.
Estos remanentes de los constantes enfrentamientos armados entre grupos antagonistas, ahora son parte de "colecciones" privadas de los lugareños, quienes la presumen en redes sociales.