La crisis hídrica por la que pasan Monterrey y su área metropolitana, no solo afecta a los residentes de esa macro-mancha urbana, sino que ya incide en el turismo y visitantes que por una u otra razón, visitan la capital de Nuevo León.
Quienes de Río Bravo, se atreven a ir a la metrópoli regia, ya empiezan a hacerlo cargados de agua.
Con garrafas y/o garrafones de 20 litros y otros recipientes, los viajeros parten con rumbo al vecino Estado, más por necesidad o deber, que por placer.
Uno de estos casos lo vivió Carlos García, quién narra que por motivo de trabajo, acudió a Allende, Nuevo León a un curso de capacitación, y para ello, se proveyó de varios garrafones de agua para su aseo personal.
“Estuvimos tres días, el primer día sí hubo agua, los otros dos, no”, precisó.
El entrevistado reveló que esa anécdota fue previa al llamado”día cero”, cuando la capital regia se quedó sin agua, por lo que deja entrever que en estos momentos difícilmente optaría por visitar Monterrey por placer o vacaciones.
Lo cierto es que incluso los habitantes de Nuevo León, se manifiestan en contra del turismo, pues afecta la poca disponibilidad de agua, como lo han hecho patente en redes sociales.
- Visitas a Monterrey por turismo, ya no son opción para residentes de Río Bravo.