Matamoros, Tam.- La coordinación de la Región III del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) “invadirá” la capital del estado, en donde amenazan con acampar en las afueras de las oficinas de la Secretaría de Educación y del mismo Palacio de Gobierno hasta que se resuelvan sus demandas.
AUMENTA NÚMEROSe estima que en esta ocasión viajen a Matamoros alrededor de mil 800 maestros, es decir, tres veces más de los que acudieron el pasado fin de semana.
El coordinador en Matamoros, Gilberto Guerrero Rivera, destacó que el mandatario estatal, Américo Villarreal Anaya, no ha respondido a sus demandas, por eso se buscará fortalecer la movilización.
Mencionó que este día se organizarán para preparar el viaje a la capital para instalarse en casas de campaña y retornar cuando se haya solucionado el conflicto.
Destacó que el domingo por la noche hubo otro intento de diálogo por parte de la dirigencia seccional organizada por el profesor Arnulfo Rodríguez. “Y nuevamente fuimos agraviados los trabajadores de la educación”, dijo.
“Hay una cerrazón entre nuestras autoridades y se ciegan, no ven la realidad que estamos viviendo, dicen que no hay ningún problema, que ellos han defendido la demanda del magisterio, y no es cierto.
“Y nos cuesta, porque si ahorita en este conglomerado de maestros y maestras y otros trabajadores de educación, preguntamos si tienen alguna problemática, les aseguro que son cientos los que van a manifestar que viven una situación difícil, porque no ha cumplido la Secretaría con sus demandas”, dijo.
- Manifestó que la idea es estar el miércoles en Ciudad Victoria, y ya se está trabajando con los secretarios generales y representantes de cada uno de los centros de trabajo para implementar la estrategia de cómo ir todos juntos a hacer las guardias.
Y para también permanecer en el Crede, “porque no vamos a entregar hasta que no nos den solución a la problemática”, advirtió.
“Hoy se sumaron más, el día de ayer, secundarias que no habían acudido al llamado de su dirigencia, desde ayer se reportaron con nosotros que hoy se sumaban, sabemos que estaban siendo reprimidos, había mucha presión.
“Probablemente todavía autoridades oficiales de la parte sindical están tratando de impedir, de persuadir, de presionar para que el compañero no se manifieste como el derecho que tiene y lo emana de nuestra Constitución, el derecho a la libre expresión y manifestación”, dijo.